Tres de cada diez argentinos sufren la pobreza, un flagelo asociado a "la aceleración de la inflación", que impide la reducción de este indicador pese a las mejoras en las variables económicas y los beneficios sociales en el país, informó hoy un estudio privado.
La pobreza afectó al 30,9 por ciento de la población en 2010, un año en el que la inflación alcanzó el 26,6 por ciento, "la cifra más elevada desde la devaluación" del peso, en 2002, según indicó el estudio de la consultora Ecolatina.
En tanto, la indigencia azotó al 10,6 por ciento de la población de Argentina, donde residen más de 40 millones de habitantes, añadió el informe.
La consultora adjudicó cerca del 60 por ciento de la subida de la inflación al alza en los alimentos registrada el año pasado.
La Canasta Básica Alimenticia (CBA), que mide la línea de la indigencia, se encareció en 2010 un 31,8 por ciento al alcanzar los 1.182 pesos (295,5 dólares) en diciembre pasado para una familia de cuatro miembros, precisó.
Los indicadores de pobreza e indigencia se redujeron respecto de 2009, pero la mejora sólo fue significativa en el caso de la pobreza extrema debido al beneficio de la Asignación Universal por Hijo, mediante el que desempleados y trabajadores informales cobran 150 pesos (38,5 dólares) por cada hijo, bajo la condición de que los niños vayan a la escuela y cumplan con el calendario de vacunación.
"Es preocupante que tras un año de fuerte recuperación y mejoras significativas en la mayoría de las variables económicas, la reducción de la pobreza e indigencia haya sido magra por culpa de la aceleración de la inflación", señaló el estudio de Ecolatina, fundada por el ex ministro de Economía Roberto Lavagna.
El informe sostiene que "para reducir la pobreza e indigencia se necesita simultáneamente crear empleo y contener los precios, especialmente de los productos básicos".
Según las últimas cifras del organismo oficial de estadísticas, cuestionado por la veracidad de sus cifras, la pobreza en la población urbana de Argentina se situó en el 12 por ciento durante el primer semestre del año, con una bajada de 1,9 puntos porcentuales respecto de la primera mitad del 2009.
Para el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), además, la inflación alcanzó en 2010 el 10,9 por ciento, una cifra que contrasta con el 25 por ciento en promedio calculado por consultoras privadas.
Las mediciones del Indec son cuestionadas por economistas, dirigentes de la oposición y empleados del propio organismo.
La pobreza afectó al 30,9 por ciento de la población en 2010, un año en el que la inflación alcanzó el 26,6 por ciento, "la cifra más elevada desde la devaluación" del peso, en 2002, según indicó el estudio de la consultora Ecolatina.
En tanto, la indigencia azotó al 10,6 por ciento de la población de Argentina, donde residen más de 40 millones de habitantes, añadió el informe.
La consultora adjudicó cerca del 60 por ciento de la subida de la inflación al alza en los alimentos registrada el año pasado.
La Canasta Básica Alimenticia (CBA), que mide la línea de la indigencia, se encareció en 2010 un 31,8 por ciento al alcanzar los 1.182 pesos (295,5 dólares) en diciembre pasado para una familia de cuatro miembros, precisó.
Los indicadores de pobreza e indigencia se redujeron respecto de 2009, pero la mejora sólo fue significativa en el caso de la pobreza extrema debido al beneficio de la Asignación Universal por Hijo, mediante el que desempleados y trabajadores informales cobran 150 pesos (38,5 dólares) por cada hijo, bajo la condición de que los niños vayan a la escuela y cumplan con el calendario de vacunación.
"Es preocupante que tras un año de fuerte recuperación y mejoras significativas en la mayoría de las variables económicas, la reducción de la pobreza e indigencia haya sido magra por culpa de la aceleración de la inflación", señaló el estudio de Ecolatina, fundada por el ex ministro de Economía Roberto Lavagna.
El informe sostiene que "para reducir la pobreza e indigencia se necesita simultáneamente crear empleo y contener los precios, especialmente de los productos básicos".
Según las últimas cifras del organismo oficial de estadísticas, cuestionado por la veracidad de sus cifras, la pobreza en la población urbana de Argentina se situó en el 12 por ciento durante el primer semestre del año, con una bajada de 1,9 puntos porcentuales respecto de la primera mitad del 2009.
Para el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), además, la inflación alcanzó en 2010 el 10,9 por ciento, una cifra que contrasta con el 25 por ciento en promedio calculado por consultoras privadas.
Las mediciones del Indec son cuestionadas por economistas, dirigentes de la oposición y empleados del propio organismo.
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