Monseñor Jesús González de Zarate, obispo auxiliar de Caracas, declaró que la destrucción de varias imágenes religiosas en el interior del país es repudiable y pone de manifiesto la pérdida de valores en la sociedad y la inclusión de lo religioso en la diatriba y violencia que reina en algunos sectores.
Dijo que no quiere adelantar hipótesis porque los autores de los ataques persiguen algún fin y podrían tener un propósito religioso, esotérico y provenir del crecimiento de la violencia en el país.
No descartó que la inclusión de lo religioso, de manera manipulada, en algunos ámbitos de la vida nacional y las declaraciones de personeros políticos en estos días pudiera tener alguna influencia.
Monseñor expresó que la utilización de lo religioso para justificar procesos políticos es inadecuada y agregó que la Iglesia ha hecho un llamado constante a recordar la misión a favor de todos y a conservar la unidad del pueblo católico.
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