El Peñarol uruguayo enfrentará al Vélez Sarsfield argentino en las semifinales de la Copa Libertadores pese a perder por 2-1 ante el Universidad Católica, cuya misión era remontar el 2-0 que le endosaron hace una semana los charrúas en el partido de ida de los cuartos de final.
En los primeros minutos, el Peñarol presionó y el portero Paulo Garcés, muy criticado por los dos goles que encajó la Católica en Montevideo, esta vez fue una verdadera muralla.
Matías Corujo, Juan Manuel Olivera y Matías Mier inquietaron la portería de la Católica.
En la jugada de Mier, el balón entró en la portería tras haber golpeado en la mano y el árbitro brasileño Heber López anuló.
La sacudida de la Católica partió de una descolgada del argentino Lucas Pratto, quien abrió el balón a la derecha por donde llegó Fernando Meneses para definir con un tiro rasante.
En los siguientes minutos las oportunidades se sucedieron en ambos lados, pero el ritmo del partido comenzó a decaer paulatinamente hasta que el árbitro puso fin al primer tiempo.
En el segundo, el Peñarol nuevamente se apropió del campo de juego por unos diez minutos, y tuvo al menos dos oportunidades claras de gol.
Pero a los 69 minutos vino el golazo de Roberto Gutiérrez que puso el 2-0. El atacante recibió pase de Ormeño, se libró de un defensa y sacó un remate que no pudo atrapar el meta Sebastián Sosa.
Cuando el partido estaba a punto de finalizar, vino el balde de agua fría para los universitarios y sus hinchas.
Luis Aguiar centró al segundo palo y Fabián Estoyanoff aprovechó la salida a medias del meta Garcés y empujó el balón al fondo.
El Peñarol perdió pero su solitario gol garantizó su pase a las semifinales.
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EFE
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