Las mujeres que son examinadas regularmente para detectar un posible cáncer de ovario, que con frecuencia se diagnostica demasiado tarde para ser tratado, no corren un riesgo menor de morir por la enfermedad, informó el sábado un amplio estudio realizado en Estados Unidos.
El ensayo clínico con una muestra aleatoria de cerca de 80.000 mujeres entre 55 y 74 años también encontró que algunas mujeres se sometieron a cirugías innecesarias después de que falsos positivos aparecieran en sus ecografías o pruebas de sangre.
El chequeo anual de cáncer de ovario no disminuye la tasa de muertes en mujeres que tienen un riesgo promedio de desarrollarlo, "pero sí incrementa los procedimientos médicos invasivos y daños asociados", dijo el estudio publicado en el Journal of the American Medical Association.
Índices similares de cáncer y muertes fueron registrados en los dos grupos de estudio: 212 casos de cáncer de ovario y 118 muertes debido a la enfermedad entre el grupo de mujeres que se sometió a chequeos anuales, y 176 casos de cáncer de ovario y 118 muertes entre el grupo de mujeres que no recibió chequeos anuales pero mantuvo su cuidado médico habitual.
La diferencia en la tasa de supervivencia "no fue estadísticamente significativa", según el estudio.
Sin embargo, 3.285 mujeres recibieron falsos positivos en sus estudios y 1.080 se sometieron a cirugía para extraer uno o ambos ovarios.
El 15% de estas mujeres experimentaron luego "complicaciones mayores", señaló el estudio dirigido por Saundra Buys de la universidad de Utah Health Sciences Center en Salt Lake City. EFE