(EFE).- Venezuela es semifinalista de la Copa América, y ha llegado con autoridad. Para empezar, es el segundo de los cuatro conjuntos de esta fase que logró su pase en noventa minutos de juego al derrotar a Chile por 1-2.
El primero fue Perú y los otros dos, Uruguay y Paraguay, lo hicieron por penaltis tras jugar 120.
Es la primera vez que Venezuela alcanza esta ronda en la historia de la competición y lo hace con el mismo promedio de goles que Brasil, uno de los favoritos y el equipo con el que compartió el grupo de la primera ronda: seis marcados y cuatro encajados.
Con los brasileños igualó a cero, derrotó a Ecuador por la mínima y, cuando perdía ante Paraguay por 3-1, remontó e igualó a tres en los minutos finales.
Frente a Chile este domingo en San Juan fue siempre al frente en el marcador desde que lo abrió Vizcarrondo a los 34 minutos, y en el mejor momento del equipo de Claudio Borghi liquidó el resultado con un gol de Cichero.
Venezuela avisó con tiempo. Su seleccionador, César Farías, había reclamado “respeto” para su equipo y sus jugadores.
“Este equipo tiene muchas horas, muchos partidos, tenemos un plan serio y coherente. Hemos triunfado ante dos grandes equipos en el grupo (Brasil y Paraguay)”, subrayaba el entrenador tras superar la fase de grupos.“No se puede admitir que los grandes sean los únicos que tienen derecho a pasar, que no se nos reconozca ni se nos respete”, indicó el joven técnico que se hizo cargo de la “vinotinto” hace tres años y medio.
Borghi dijo tras el partido en el que Chile se despidió de la Copa América que no cree en la suerte. Y en eso dio un respaldo indirecto a Venezuela, que sufrió en la segunda parte dentro de su área, que vio cómo dos pelotazos daban en los palos de su portería y cómo el guardameta Vega paraba el resto de la artillería chilena.
Venezuela es semifinalista, y hace historia.
Por Enrique Escande