(AP) — El gañido de una decena de halcones acompañó el martes la despedida de los restos de Felipe Camiroaga, el animador más famoso de la televisión chilena, muerto a comienzos de mes cuando el avión militar en que viajaba se estrelló en el mar.
La misa fúnebre del animador se realizó en un patio del canal estatal Televisión Nacional (TVN) donde trabajó por más de 20 años animando varios programas, entre ellos “Animal nocturno” y el matinal “Buenos Días a Todos”.
También condujo el Festival Internacional de la Canción de Viña del Mar en 2009 y 2010.
Unas 500 personas fueron invitadas a la ceremonia, mientras en el exterior se congregaron miles de seguidores de Camiroaga, quien todas las mañanas acompañaba a millones de personas en sus hogares.
En el patio de la televisora se recreó un altar lleno de flores y en un costado se ubicaron amarrados a plataformas individuales una decena de halcones que pertenecían al animador, a los que él mismo entrenaba en una pequeña finca que tenía en Chicureo, unos 40 kilómetros al norte de Santiago.
Camiroaga, de 44 años, amaba los animales y la vida sencilla del campo. También tenía caballos y más de una decena de perros de distintas razas.
La ceremonia comenzó con la llegada de un hermano que portaba un ánfora con las cenizas de Camiroaga, cuyo cuerpo completo no pudo ser recuperado del mar. Las cenizas fueron luego trasladadas en una carroza fúnebre hasta un cementerio al norte de la ciudad, donde se realizará una ceremonia privada.
Junto al animador murió un equipo de cuatro personas de “Buenos Días a Todos”, seis miembros de la Fundación “Desafío Salvemos Chile”, dos funcionarias del Ministerio de Cultura, dos del equipo de comunicaciones de la Fuerza Aérea y seis tripulantes.
El avión cayó al mar a pocos metros del aeródromo del archipiélago Juan Fernández, 670 kilómetros al oeste del continente, donde las personas de TVN y de la fundación viajaban para ayudar con la reconstrucción tras el tsunami de febrero de 2010.
De los 21 pasajeros se han ubicado los cuerpos completos de cinco y fragmentos de otros 10.
El ministro de Defensa, Andrés Allamand, informó el martes que el gobierno y la Fuerza Aérea pidieron ayuda a la Unidad de Buceo y Salvataje de Estados Unidos, desde donde llegará el miércoles un equipo de buceo que puede descender 300 metros de profundidad y dos submarinos no tripulados que alcanzan los 800 metros.