AVN .- El Gobierno griego aprobó este domingo el despido de 30.000 funcionarios públicos, presionado por emisarios de la troika, integrada por la Comisión Europea, el Fondo Monetario Internacional y el Banco Central Europeo.
De acuerdo con Prensa Latina, el Consejo de Ministros tomó la decisión la noche de este domingo en una cita extraordinaria convocada por el primer ministro, George Papandreu, con el propósito de ahorrar 300 millones de euros hasta finales de 2012.
Según lo acordado en esa reunión, los despedidos cobrarán 60% del salario que devengaban durante un año, a la espera de reubicación, despido o jubilación.
La troika exigió a Grecia eliminar miles de empleos, rebajar los sueldos y pensiones, además de privatizar empresas públicas como condición para el desembolso de un sexto tramo de rescate, valorado en 8.000 millones de euros.
Para cumplir las demandas de los acreedores, el ministro de Finanzas griego, Evangelos Venizelos, anunció el jueves pasado rebajas de hasta 25% en las mensualidades de 153.000 trabajadores públicos.
Asimismo, el Gobierno adelantó sobre la privatización de entidades estatales y un impuesto para todos los propietarios de viviendas e inmuebles.
El Estado cobrará esa nueva carga impositiva en el recibo de la luz, mientras que a las familias negadas a pagarla se les cortará el suministro eléctrico.
Ante este escenario de crisis, la Confederación de Funcionarios Públicos Adedy calificó como salvajes las medidas y convocó manifestaciones de protesta en la capital y otras ciudades.
Por su parte, los sindicatos anunciaron que protagonizarán huelgas el 5 y 19 de octubre contra los drásticos recortes que socavan el bienestar social y los derechos laborales de los griegos.
No está claro si la Eurozona (17 países) acordará este lunes en Luxemburgo, durante su reunión ministerial, la entrega a esta nación del sexto tramo del rescate o lo aplazará para la cita del 13 de este mes, tras aprobarlo durante la cumbre de ministros de Finanzas, celebrada en julio pasado.
De acuerdo con Prensa Latina, el Consejo de Ministros tomó la decisión la noche de este domingo en una cita extraordinaria convocada por el primer ministro, George Papandreu, con el propósito de ahorrar 300 millones de euros hasta finales de 2012.
Según lo acordado en esa reunión, los despedidos cobrarán 60% del salario que devengaban durante un año, a la espera de reubicación, despido o jubilación.
La troika exigió a Grecia eliminar miles de empleos, rebajar los sueldos y pensiones, además de privatizar empresas públicas como condición para el desembolso de un sexto tramo de rescate, valorado en 8.000 millones de euros.
Para cumplir las demandas de los acreedores, el ministro de Finanzas griego, Evangelos Venizelos, anunció el jueves pasado rebajas de hasta 25% en las mensualidades de 153.000 trabajadores públicos.
Asimismo, el Gobierno adelantó sobre la privatización de entidades estatales y un impuesto para todos los propietarios de viviendas e inmuebles.
El Estado cobrará esa nueva carga impositiva en el recibo de la luz, mientras que a las familias negadas a pagarla se les cortará el suministro eléctrico.
Ante este escenario de crisis, la Confederación de Funcionarios Públicos Adedy calificó como salvajes las medidas y convocó manifestaciones de protesta en la capital y otras ciudades.
Por su parte, los sindicatos anunciaron que protagonizarán huelgas el 5 y 19 de octubre contra los drásticos recortes que socavan el bienestar social y los derechos laborales de los griegos.
No está claro si la Eurozona (17 países) acordará este lunes en Luxemburgo, durante su reunión ministerial, la entrega a esta nación del sexto tramo del rescate o lo aplazará para la cita del 13 de este mes, tras aprobarlo durante la cumbre de ministros de Finanzas, celebrada en julio pasado.