Investigadores en Australia comenzaron a probar
un rociador bucal con sustancias derivadas del cannabis y utilizado en
tratamientos contra la esclerosis múltiple para combatir la adicción a la
marihuana, informaron hoy fuentes de la investigación.
El fármaco, llamado Sativex,
empezó a probarse en Sídney y la vecina Newcastle para mitigar los efectos del
síndrome de abstinencia, que provoca insomnio, cambios de humor y antojos.
La directora del Centro Nacional de Prevención e
Información sobre Marihuana, Jan Copeland, dijo a la emisora local ABC que
el rociador es "un producto elaborado de una planta orgánica" y
se parece a la terapia contra el tabaquismo en la que se reemplaza la
nicotina.
El rociador bucal tiene dosis mínimas de
su principio activo, el THC (tetrahidrocanabinol), para evitar que el
paciente quede narcotizado y ayudarle a reducir su consumo de marihuana.
También, tiene grandes dosis de ácidos
carboxílicos que ayudan a mitigar la ansiedad y tiene efectos
antipsicóticos.
La marihuana es una sustancia polémica porque
posee propiedades terapéuticas, pero también se considera una droga con efectos
perniciosos fuera del uso médico.
Unas 200.000 personas fuman marihuana en
Australia, que tiene una población de unos 22,3 millones de
personas.
Australia y Nueva Zelanda son los países con la
mayor tasa de consumo de marihuana y anfetamina en el mundo, según un estudio
publicado recientemente en la revista médica The Lancet.
EFE