La fecha es sin duda uno de los momentos más importantes de la historia universal: con ella se acabaron todas las dinastías chinas, poniendo fin a una tradición de cerca de 2.000 años.
Sin embrago, en comparación con la celebración de los 90 años del Partido Comunista de China o los 60 de la fundación de la República Popular, los 100 años del levantamiento de Wuhan ha despertado mucha menos atención mediática y gubernamental.
El acto oficial más relevante se vivió en el Gran Salón del Pueblo, donde toda la plana mayor del Partido Comunista rindió homenaje a los revolucionarios chinos de 1911
EFE