Amplia adhesión a megacanje de deuda que permitirá evitar default de Grecia
El Gobierno griego anunció el viernes que casi un 84% de sus acreedores privados había aceptado condonar más de la mitad de sus inversiones en una gigantesca reestructuración de deuda que permitirá desbloquear fondos para salvar de la quiebra a este país de la Eurozona.
Según el ministerio de Finanzas, los tenedores de bonos de deuda griega por un valor de 172.000 millones de euros aceptaron el canje, una suma que representa el 83,5% de los 206.000 millones de deuda pública en manos de inversores privados.
Ese porcentaje se eleva a 85,8% si se tiene en cuenta solamente a quienes adquirieron títulos bajo regímenes de derecho griego.
Se trata de la mayor reestructuración de deuda de la historia, que supera a los 82.000 millones de dólares del default de Argentina en 2002 (73.000 millones de euros de aquella época).
El gobierno griego agregó que con la amplia adhesión alcanzada podrá activar las cláusulas de acción colectiva (CAC) que forzarán a plegarse a la operación a los acreedores privados reticentes.
La Unión Europea (UE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI) habían supeditado al éxito de esta operación -que supone una quita del 53,5% del valor de los bonos griegos- la entrega de créditos por unos 130.000 millones de euros para salvar de la quiebra al país.
Esa suma corresponde al segundo rescate acordado a Grecia por sus socios de la Eurozona. El primer rescate acordado en 2010, por 110.000 millones de euros, se reveló insuficiente para salvar a un país que tiene las cuentas desbocadas y entra en 2012 en su quinto año consecutivo de recesión.
Menos de un 75% de adhesión hubiera implicado un fracaso del canje y hubiera expuesto a Grecia a un rápido default, dado que enfrenta vencimientos por 14.400 millones de euros el próximo 20 de marzo.
Las bolsas, el petróleo y el euro subieron el viernes en Asia tras el anuncio. Las bolsas europeas abrieron estables, debido a que la víspera ya habían asumido con fuertes alzas la posibilidad de un canje exitoso.
El ministro griego de Finanzas, Evangelos Venizelos, expresó su agradecimiento a los inversores que condonaron más de la mitad de sus deudas, en una "histórica" iniciativa.
"En nombre de la República, quiero expresar mi aprecio a todos nuestros acreedores que han apoyado nuestro ambicioso programa de reforma y ajuste y que han compartido los sacrificios del pueblo griego en este histórico esfuerzo", señaló.
La aplicación de las CAC permitirá superar un 95% de adhesión al plan, requerido para que Grecia pueda atenerse al programa de reducir su deuda de un 160% del PIB en la actualidad (350.000 millones de dólares) a un 120,5% en 2020.
Pero la adhesión forzada también podría activar los seguros contra impagos (CDS), que en febrero se elevaban a 3.200 millones de euros.
Venizelos extendió hasta el 23 de marzo el plazo para que los tenedores de bonos bajo regímenes extranjeros se sumen al canje (sólo un 69% de ellos lo había hecho este viernes).
Alemania, principal economía europea, consideró que el acuerdo representa un "gran paso" hacia la estabilidad de Grecia.
El Instituto Internacional de Finanzas (IIF), una asociación de la banca que participó en la elaboración del canje, afirmó igualmente que la reestructuración "la da a Grecia una gran oportunidad de avanzar con su programa de reformas y refuerza la capacidad de la Eurozona de crear un entorno de estabilidad y crecimiento".
Poco antes del anuncio oficial de los resultados del canje, la directora gerente del FMI, Christine Lagarde, había afirmado que la perspectiva de un acuerdo "aleja, por el momento, el riesgo de una crisis".
El canje acordado este viernes se concretará el próximo lunes para las obligaciones de derecho griego.
AFP