EFE) El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, anunció hoy una inversión de 1,3 billones de pesos (unos 738,13 millones de dólares) en ayudas a vivienda “para los menos pobres de los pobres”, lo que se suma al plan de entregar 100.000 casas gratis a la población más vulnerable.
El mandatario explicó su estrategia en materia de vivienda en su llamado “Acuerdo para la prosperidad” número 70, que este sábado se celebró en Inírida, capital del selvático departamento del Guainía, limítrofe con Venezuela y Brasil.
Santos precisó que anuncio hecho el pasado lunes para la construcción de esas 100.000 casas gratuitas con un plazo de 24 meses es un complemento de su plan de subsidio a los programas de construcción de un millón de las llamadas “viviendas sociales”.
Hasta el momento, el Ministerio de Vivienda de Colombia ha construido 246.000 viviendas de ese plan, por lo que Santos valoró el “empuje” de la inversión de 738,13 millones de dólares aprobado en los últimos días por la cartera de Hacienda porque garantizará la perpetuidad de ese programa en los siguientes años.
El Gobierno colombiano busca ahora darle prioridad a la vivienda como una herramienta en su estrategia para reducir la inequidad que tanto “avergüenza” al presidente, de ahí la implementación de esos planes y el cambio del responsable del Ministerio de Vivienda.
Santos hizo público el lunes pasado el relevo de Beatriz Uribe por el hasta el momento ministro del Interior, Germán Vargas Lleras, al que hoy calificó como un “funcionario de alta calidad”.
Estos anuncios se dieron días después de que una encuesta revelara que la imagen favorable del presidente colombiano bajó al 58 por ciento y es inferior en quince puntos a la que había alcanzado tres meses después de asumir el poder, en agosto de 2010.
Al respecto, Santos dijo que no le para “muchas bolas” (no presta atención) a los resultados de las encuestas porque “el capital político es para invertirlo y el que vive de las encuestas acaba equivocándose”.
Aunque admitió que le inquietan algunas de las “alertas” que arrojaron las consultas, sobre todo en cuanto a los asuntos que interesan a los colombianos, concluyó: “no me debe preocupar si mi popularidad esta arriba o abajo”.
