Luego que entrara en vigencia el pasado 2011 la Ley de Arrendamiento, la oferta del alquiler de viviendas en los sectores populares cayó 30%. Así lo afirma el reporte de la Asociación de Propietarios de Inmuebles Urbanos (Apiur) y el Comité de Defensa de viviendas en Alquilr (Codevivial).
Incluyendo las urbanizaciones y las barriadas la disminución de viviendas para ser alquiladas es de 70%. Roberto Orta, presidente de Apiur, aseguró que la ley afecta tanto a propietarios como a inquilinos por igual, “porque nadie quiere alquilar y la demanda de personas sin casa propia crece cada vez más”, dijo.
Igualmente resaltó que los conflictos entre arrendatarios e inquilinos se acrecienta cada vez más pues en muchos casos los inquilinos no quieren cancelar el monto, reaccionando con violencia contra el propietario cuando éste le solicita el pago correspondiente. Orta argumenta que este panorama es más notorio en los sectores populares.Por su parte Maritza Fariña, de Codvivial, reiteró que las zonas populares están cada vez más afectados por la providencia en cuanto a la Regularización y Control de los Arrendamientos de Viviendas.
