Un avance importante para la prevención del ictus o ACV en pacientes con fibrilación auricular -el tipo de arritmia más frecuente- fue presentado por el cardiólogo argentino, Ricardo Rey, en el marco del X Simposio Venezolano de Cardiología Preventiva.
“Una de cada 100 personas en el mundo tiene fibrilación auricular y al llegar a los 65 años esta cifra se eleva a 10 de cada 100”, señala Rey. Estas personas tienen el riesgo de producir trombos dentro de su corazón si no están bien medicadas por sus especialistas, por lo que es importante que reciban anticoagulante en sus dosis adecuadas para evitar que al formarse trombos estos se desprendan y viajen por el torrente sanguíneo produciendo el ictus. Las cifras al respecto son contundentes. Rey indica que de cada 100 personas que han sufrido un ictus o ACV por falta de irrigación sanguínea, 15 se atribuye a ese tipo de arritmia llamada fibrilación auricular
Rey aclara que hay dos tipos de medicaciones para esta arritmia. El primero, es para controlar la arritmia y el otro, para evitar que se formen trombos en el corazón (anticoagulantes). “La última generación de anticoagulante que ya se está utilizando en algunos países del mundo y ha sido desarrollada por Bayer Health Care, inhibe uno de los factores que participa en la coagulación de la sangre, el factor Xa, impidiendo la formación de trombos.
Por su parte, el doctor Nohel Castro Blanchard, cardiólogo venezolano, explica que desde hace más de 50 años se ha usado clínicamente una droga denominada warfarina, pero ésta presentaba muchas limitantes porque “requería de una monitorización permanente para mantener en el paciente un grado de anticoagulación que no sea excesiva, porque siempre es necesario, en caso de una herida, que el proceso hemostático natural del organismo pueda cerrarla”.
Rey indica que antes era necesario el ajuste de dosis permanentemente. “Con este nuevo anticoagulante oral es más fácil para el paciente: no tiene que realizarse frecuentes análisis de sangre, visitar al médico y perder su ritmo de vida normal, porque estas nuevas moléculas como rivaroxabán necesitan menos controles, se toman una vez por día y no interactúan con alimentos u otros medicamentos”.
Para Rey, el reto de los investigadores en farmacología, más allá de desarrollar una nueva molécula, está en determinar su efectividad y seguridad. “Por eso, en estos momentos se está en la fase de la evaluación de estudios clínicos que tienen el objetivo de demostrar la eficacia del rivaroxabán frente al estándar actual que es la warfarina, la investigación más contundente es el estudio denominado ROCKET AF, en el que participaron más de 14 mil pacientes con fibrilación auricular”.
La fibrilación auricular no es la única patología donde el anticoagulante tiene indicación; en Venezuela ya está aprobado su uso para prevenir trombosis posterior a una cirugía electiva de reemplazo de rodilla o cadera.
NOTA DE PRENSA
