El caso del asesinato de la jefa de misión diplomática venezolana en Kenia sigue levantando polémica. Este viernes, el diario 2001 destacó que una carta de la Cancillería debió ser el primer paso del Estado sobre el caso.
El sospechoso del asesinato de Olga Fonseca, Dwigth Sagaray, podría ser juzgado enVenezuela si entre ambos países hubiera un acuerdo de extradición, pero no lo hay, y, como resalta el diario, Venezuela no anda firmando esos acuerdos. Sin embargo, es función de la Cancillería velar por la situación de sus naturales en el exterior.