La economía china finalmente está ganando tracción, mostraron el jueves datos divulgados por una agencia oficial y por el banco HSBC.
Crece la evidencia de que la economía se recuperó en octubre después de que restricciones locales al crédito y una pobre demanda desde el extranjero presionaron al crecimiento económico en el tercer trimestre a su tasa más débil desde la crisis financiera.
La lectura final para el índice de gerentes de compras de HSBC subió a 49,5 en octubre, poco menos que la línea de 50 puntos que divide la aceleración de la desaceleración del crecimiento, desde una lectura de 47,9 en septiembre.
La cifra fue la más alta desde febrero y se desvió más de lo usual desde el dato preliminar, o anticipado, para octubre de 49,1 divulgado la semana pasada.
"El PMI final de octubre subió a un máximo nivel en ocho meses, lo que implica que la actividad industrial de China sigue elevándose tras una modesta aceleración el mes pasado", escribió el economista de HSBC Hongbin Qu en un comunicado que acompañó al resultado.
"Esto está dado principalmente por el aumento de nuevas órdenes gracias al filtrado de medidas de alivio anteriores, mientras que el panorama de exportaciones continúa desafiante", añadió. El subíndice del HSBC para nuevas órdenes se elevó a 51,2, su mayor nivel desde octubre del 2011.
Más temprano, la lectura del índice de gerentes de compra oficial para octubre divulgada por la Oficina Nacional de Estadísticas mostró que el índice subió a 50,2 desde 49,8 en septiembre, justo por debajo de la cifra de 50,3 pronosticada por analistas consultados en un sondeo de Reuters la semana pasada.
Eso también confirmó una tendencia hacia la recuperación en la segunda mayor economía del mundo.
"El continuo rebote de los subíndices, incluyendo nuevas órdenes, órdenes de exportación y cantidad de compras, indica que el proceso de liquidación de existencias de las compañías básicamente ha terminado", comentó en una declaración que acompañaba al índice Zhang Liqun, un investigador del Centro de Investigación y Desarrollo del Consejo Estatal.
"Prevemos que el crecimiento económico de China acabará su declive y rebotará levemente en el futuro", agregó.
De hecho, ambos datos parecen indicar que la economía se estabilizó en septiembre y comenzó a subir en octubre.
MEJOR CUARTO TRIMESTRE
"La vuelta del PMI a más de 50 sugiere que el impulso económico de hecho se ha acelerado. Indica que el efecto del alivio de la política podría haber sido más fuerte a lo esperado por el consenso", escribió Zhiwei Zhang de Nomura en un comentario enviado a Reuters por correo electrónico.
"Creemos que los datos macroeconómicos seguirán sorprendiendo para bien en los próximos meses, en la medida en que el Gobierno sigue aliviando la política a través del período de transición del liderazgo", agregó.
Se espera que China vea un mejor cuarto trimestre después de que el crecimiento económico se desaceleró a un 7,4 por ciento interanual en el tercer trimestre, con lo que superaría la meta del Gobierno para este año de lograr una expansión del 7,5 por ciento o más.
El privado PMI HSBC que captura visiones principalmente de firmas pequeñas y orientadas a exportaciones en el vasto sector fabril chino.
Manufactureros reportaron mayores costos de insumos -particularmente para materias primas-, pero por primera vez en un año pudieron traspasar esos costos mediante el alza de precios, escribió en un análisis adjunto Markit Economics, que compila la información para HSBC.
Un subíndice de empleo también aumentó a su mayor nivel en ocho meses, aunque las fábricas en su conjunto siguieron cerrando puestos de trabajo.
Hasta ahora, China ha evitado las enormes pérdidas de empleos o descontento urbano temidos por el gobernante Partido Comunista, que ha sufrido un año de luchas internas mientras distintas facciones se preparan para una transferencia de liderazgo que se da una vez por década y que tendrá lugar en noviembre.
Un subíndice de producción en el índice PMI HSBC también mejoró tras caer en septiembre.
En el frente exportador, "se informó de una débil demanda desde Europa y Estados Unidos", sostuvo.
Tras medidas de alivio monetario este año, el suministro del crédito en China ha aumentado, pero la inflación se ha mantenido baja, lo que ha permitido a las autoridades relajarse y contenerse a la hora de realizar nuevos ajustes.
Algunos esperan medidas adicionales tras el décimo octavo congreso del Partido Comunista en noviembre, con la finalidad de presentar al nuevo liderazgo con un impulso económico.