El
dirigente regional del PSUV, Luis Figuera, expresó que el partido rojo, está obligado a reflexionar
sobre la elección del 14-A, para convertirse en una organización que
pueda recoger el sentir de quienes apoyaron una opción distinta.
Un
sector de los que votaron contra nuestro candidato no lo hicieron por odio, ni
porque se consideraron representados por otro liderazgo, sino porque fueron
atemorizados por la guerra económica, la
propaganda negra, y el sabotaje eléctrico.
Convencer
a los electores que sufragaron por otra opción es el reto y, requiere, profundizar la batalla de ideas, abrir un
proceso de dialogo bolivariano, e impulsar los ejes focales definidos por el
presidente Nicolás Maduro.
Figuera
puntualizó que el PSUV debe fortalecer
las direcciones políticas de las ciudades urbanas con militantes más eficaces,
con capacidad de pensamiento estratégico que puedan aportar propuestas
creativas para enfrentar las diversas formas de guerra económica.
Debemos
profundizar el trabajo organizativo y militante en los sectores de las clases
medias, y en el sector joven de la población, con el objetivo de atenderlos más
detalladamente y, evitar que sean
víctimas de la influencia de los medios derechistas.
El
dirigente rojo señaló que es necesario volver a convencer a las 615.626 personas
que decidieron no favorecerlos con su voto el 14-A que el cansancio y el hastío
por la política sólo conducen a la dominación de clase.
Es
importante abrir un espacio de comunicación con los simpatizantes que en los
últimos años, han estado alejados del proceso político a consecuencia de la guerra comunicacional que se libra
contra la revolución.
Para
finalizar el líder rojo llamó al pueblo
a mantenerse alerta, y apoyar la
auditoría que va a realizar el CNE, con el fin de aislar al sector
fascista que insiste en aplicar las
tácticas del llamado golpe suave desconociendo el triunfo del candidato Nicolás
Maduro.