El reciente anuncio realizado por el presidente de la República, Nicolás Maduro, sobre la construcción de un nuevo pulmón natural para el Distrito Capital, llamado Gran Parque de Caracas Hugo Chávez, ha despertado el interés y la curiosidad en diversos profesionales de la arquitectura en Venezuela.
El proyecto que incluye el levantamiento de diversas edificaciones destinadas al deporte, la cultura y la educación, en un terreno de 844 hectáreas, ubicado en la Rinconada , Caracas, se encuentra a cargo de un equipo de profesionales venezolanos, italianos, españoles e ingleses, encabezado por el arquitecto Richard Rogers.
Rogers es responsable de importantes proyectos a nivel mundial como el diseño del Terminal 4 del aeropuerto de Barajas; el nuevo World Trade Center Tower 3 de Nueva York; la Biblioteca de Birmingham en el Reino Unido; Palacio de Justicia de Amberes, Bélgica, entre otros.
La noticia pareciera no haber sido bien recibida por parte de los profesionales del gremio en el país, pues los mismos temen que el presupuesto de 300 millones de bolívares aprobado por el Presidente de la República no sea suficiente para cubrir los requerimientos de los diseños acostumbrados por Rogers.
El arquitecto venezolano, Oscar Tenreiro, explica en su blog que esos proyectos se caracterizan por el uso casi exclusivo del acero en todas sus formas; la articulación de los elementos estructurales con la ayuda de componentes auxiliares que trabajan sólo a tracción; separación, identificación y exhibición de las instalaciones; descomposición en partes separadas visibles de las partes de relleno. “Productos que no tenemos aquí”, aseveró.
Asimismo, María Isabel Peña, directora del Instituto de Urbanismo de la UCV, asegura que no hubo un proceso de licitación ni de concurso. “Un proyecto con la calidad de los de Rogers implicaría que tendríamos que importar hasta el último tornillo. Sería una cosa faraónica y no sé si el país en este momento lo justifica”, concluyó.
Con información de ABC
