Científicos de la Florida Atlantic University creen que el impacto que recibió en la cabeza un niño de siete años residente en Loxahatchee, al norte de Miami (EE.UU.), pudo ser procedente del diminuto fragmento de un meteorito, informó este miércoles un medio local.
El niño, Steven Lippard, se encontraba jugando fuera de su casa el pasado sábado cuando recibió en la cabeza el impacto de un objeto que le causó una herida profunda y que requirió de tres puntos de sutura.
El padre del niño creyó en un principio que la herida había sido ocasionada por el golpe de una pelota de golf o de un pájaro, pero encontró unas pequeñas piedras junto a su hijo y decidió llevarlas a un laboratorio para su análisis.
Las pruebas realizadas posteriormente en un laboratorio de la citada universidad indicaron que las pequeñas piedras que le golpearon -del tamaño de un guisante- eran metálicas, una señal de que pueden proceder del espacio, recogió el Canal 12.
Se espera que un examen químico pueda determinar finalmente si estas diminutas piedras proceden o no de la estratosfera.
Según este medio, sólo dos personas en Estados Unidos recibieron en tiempos recientes el impacto de algún tipo de fragmento de meteorito.
En 1954, una mujer de Alabama sufrió heridas tras ser impactada por un fragmento de unos cuatro kilos y, en 1992, cayó otro de unos 13 kilos sobre un vehículo en Nueva York.
El niño, Steven Lippard, se encontraba jugando fuera de su casa el pasado sábado cuando recibió en la cabeza el impacto de un objeto que le causó una herida profunda y que requirió de tres puntos de sutura.
El padre del niño creyó en un principio que la herida había sido ocasionada por el golpe de una pelota de golf o de un pájaro, pero encontró unas pequeñas piedras junto a su hijo y decidió llevarlas a un laboratorio para su análisis.
Las pruebas realizadas posteriormente en un laboratorio de la citada universidad indicaron que las pequeñas piedras que le golpearon -del tamaño de un guisante- eran metálicas, una señal de que pueden proceder del espacio, recogió el Canal 12.
Se espera que un examen químico pueda determinar finalmente si estas diminutas piedras proceden o no de la estratosfera.
Según este medio, sólo dos personas en Estados Unidos recibieron en tiempos recientes el impacto de algún tipo de fragmento de meteorito.
En 1954, una mujer de Alabama sufrió heridas tras ser impactada por un fragmento de unos cuatro kilos y, en 1992, cayó otro de unos 13 kilos sobre un vehículo en Nueva York.
EFE