Un guardia de seguridad que trabajaba en la residencia donde vivía Oscar Pistorius mantuvo este lunes que el campeón paralímpico sudafricano le dijo que "todo iba bien" justo después de haber matado a su novia Reeva Steenkamp.
Sometido a un contrainterrogatorio por el abogado de Pistorius, Barry Roux, el testigo, Pieter Baba, mantuvo su versión de los hechos cuando se le presentó una relación de las llamadas telefónicas del centro de seguridad del barrio privado de Pretoria donde vivía el atleta en el momento de la tragedia.
"Yo llamé al señor Pistorius primero. El señor Pistorius me llamó después [...] Yo fui el que llamó primero", tras haber sido alertado por un vecino, repitió varias veces el testigo en el inicio de la segunda semana de juicio en Pretoria.
"El señor Pistorius llamó primero y usted le volvió a llamar poco después", le respondió entonces Roux.
"Yo llamé al señor Pistorius y el señor Pistorius me dijo 'todo va bien'. Pero me di cuenta de que lloraba. Y la comunicación se cortó", sostuvo Pieter Baba, reiterando su testimonio del viernes.
"El señor Pistorius me volvió a llamar, pero lloraba, y la línea se volvió a cortar [...] Señora, lo que le he dicho a la corte es la verdad, agregó dirigiéndose a la juez Thokozile Masipa.
El abogado de Pistorius mostró luego a la corte la primera declaración de Pieter Baba a la policía poco después de la tragedia, en la que éste declaró que el atleta le dijo que él estaba "bien" y no que "todo iba bien" como en la segunda declaración, efectuada posteriormente cuando otro inspector retomó la investigación desde cero.
Pieter Baba respondió que cuando hizo la primera declaración estaba "muy cansado".
Oscar Pistorius está acusado del asesinato de su novia, Reeva Steenkamp, en la madrugada del 14 de febrero de 2013. El atleta afirma que la mató por error, creyendo que estaba disparando contra un ladrón que se había escondido en su cuarto de baño. AFP