EFE.- El jefe de la diplomacia estadounidense, John Kerry, llegó este domingo a El Cairo en una delicada misión destinada a sacar del caos a Irak, donde los insurgentes sunitas consolidan su control en el oeste de Irak, amenazado con el desmembramiento.
El secretario de Estado nortamericano, John Kerry, exhortó este domingo a los dirigentes iraquíes a superar las divisiones sectarias, y dijo que Washington no es responsable de la crisis en Irak.
Tras reunirse en El Cairo con el presidente egipcio, Abdelfatah al Sisi, Kerry pidió a los iraquíes que se unan para enfrentar al terrorismo en su país, tras los avances del grupo Estado Islámico de Irak y el Levante.
Asimismo, enfatizó que no le corresponde a Estados Unidos escoger a los dirigentes iraquíes y abogó por un gobierno de Bagdad unido que represente a todos los sectores del pueblo iraquí para hacer frente a los yihadistas.