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Hato El Piñero: un paraíso recóndito en el llano venezolano

(Prensa Mintur).- El encantador Hato El Piñero es un paraíso silvestre ubicado en el dilatado llano venezolano, específicamente en el estado Cojedes. Cuenta con una extensión de 80 mil hectáreas y un sin fin de historias que la naturaleza, con su propia dinámica, escribe cada día.

 

El lugar representa una excelente opción de alojamiento y recreación para el periodo vacacional 2014, siendo administrado por la operadora estatal Venezolana de Turismo, S.A. (Venetur). Para atender a los turistas nacionales y extranjeros, el hato cuenta con 12 cómodas habitaciones; comedor, donde se prepara la más deliciosa comida llanera; safari diurno y nocturno, con guías especializados para la observación de flora y fauna; y bar.

Para los amantes de la ciencia, existe la denominada “Estación Biológica”, que es un espacio que acoge a investigadores y estudiantes de biología, zoología, ciencias forestales o carreras afines. Allí pueden realizar sus prácticas, donando a modo de intercambio material intelectual para enriquecer la estación.

El recorrido guiado es fascinante de principio a fin, en el que los participantes además de sorprenderse con la diversidad de fauna, también les resulta inevitable maravillarse con la flora. En este aspecto destaca una zona exclusiva de árboles que fueron sembrados, constituyendo una muestra de todas las especies que existen en el hato; así como un túnel de bambú, impregnado de misterio y verdor.

Observación de fauna silvestre

Este mágico lugar cuenta con más de 340 especies de aves, de las aproximadamente 9 mil especies identificadas en el mundo. Esto más allá de ser un número importante, es una condición privilegiada que seduce especialmente a los ornitólogos. Adicionalmente, se han registrado49 especies de mamíferos y 42 especies de reptiles.

En el Hato El Piñero todos los animales habitan de forma silvestre. En la época de sequía es posible observar mayor cantidad de especies, ya que la cantidad de agua se reduce y es incluso predecible la hora en que los animales se congregarán para hidratarse. El panorama es distinto en la época de lluvias, porque hay abundante agua y los animales están muy dispersos.

En una reciente visita, siguiendo la ruta turística hacia el fundo Charco Azul —dedicado a la cría de ganado vacuno— se observan diversas aves, así como chigüires, búfalos, venados, vacas, conejos, tortugas, babos, mariposas y un jaguar, que al advertir la presencia de visitantes se esconden velozmente entre los matorrales.

En caso de encontrarse con un animal salvaje durante el recorrido, el secreto para disfrutar de este momento al máximo es mantenerse en total silencio, aunque la emoción sea gigante. El vínculo con la naturaleza surge en quienes se atreven a desconectarse de la vida cotidiana, y se fortalece en la medida en que observan con admiración al animal y vegetal en su normal desenvolvimiento.

Para ampliar la información sobre los paquetes turísticos que ofrece Venetur visita: http://www.venetur.gob.ve/.