El Secretario General de la ONU, Ban Ki-moon indicó este viernes que observa con gran preocupación la situación de Burkina Faso.
El presidente de ese país africano, Blaise Compaoré, dimitó hoy del cargo, después de violentas protestas en contra de la extensión de su mandato de 27 años.
Las movilizaciones comenzadas hace tres días incluyeron la toma e incendio del Parlamento.
El Secretario General instó a todas las partes a ejercer la calma y la moderación y a utilizar el diálogo para resolver la crisis actual.
Por otra parte, el representante especial de la ONU en África Occidental, llegó hoy a la capital de Burkina Faso, Ouagadogou, como parte de una misión conjunta, de la que participa el presidente de la Comisión Económica de los Estados de África Occidental (ECOWAS) y de la Comisión de Asuntos Políticos de la Unión Africana.
Kadré Désiré Ouédraogo se reunirá con varios líderes políticos y religiosos en conexión con la situación de inestabilidad en ese país.