El arzobispo de San Salvador, José Luis Escobar Alas, reveló este domingo un segundo caso de pederastia y pedofilia en el que se involucran a sacerdotes de la iglesia local, al mismo tiempo que exigió al Estado que reforme las leyes para que este tipo de delito no prescriban. La situación ha hecho tambalear a la iglesia, colocada en las encuestas como una de las instituciones más creíbles de este convulsionado país centroamericano.
El jueves pasado la jerarquía católica anunció la suspensión de todas sus funciones del sacerdote Jesús Delgado tras conocerse denuncias de una mujer que en la actualidad tiene 42 años. Delgado era vicario de la Arquidiócesis de San Salvador y principal biógrafo de monseñor Óscar Romero, asesinado por escuadrones de la muerte de la ultraderecha. La muerte violenta de Romero se considera el detonante de la guerra civil que envolvió a esta pequeña nación durante 12 años.
El caso revelado este domingo de abuso sexual responde al sacerdote Juan Francisco Gálvez, quien fungió, hasta el 15 de octubre de 2015, como párroco de la Iglesia Nuestra Señora del Rosario, del municipio Rosario de Mora, departamento de San Salvador. El arzobispo de San Salvador confirmó en la homilía dominical y en una extensa conferencia de prensa el caso de Gálvez, quien no ha aceptado los cargos que se le achacan, a diferencia Delgado. A Gálvez se señalan varios casos que se investigan como pedofilia y pederastia.
“Después de haber realizado las investigaciones preliminares, el día 15 de octubre de este año, Gálvez fue suspendido de todas sus facultades sacerdotales y pastorales para dar inicio inmediatamente a su proceso canónico, recién hemos finalizado la fase de instrucción de dicho proceso y se enviará a la santa sede donde finalizará el proceso y se dicte sentencia respectiva”, afirmó Escobar Alas.
Asimismo agregó, “quiero dejar bien claro que esta Arquidiócesis no va a tolerar ningún caso de abuso a menores por parte de los clérigos; nuestra norma de acción, ante abuso a niños y niñas es cero tolerancia, sin excepción alguna; cada caso que haya será tratado con la mayor justicia posible, conforme a la verdad y con transparencia, y el sacerdote culpable será procesado hasta que se le dictamine la sentencia definitiva que debe cumplir”.
El primer caso de pedofilia en el país que se conoció fue revelado por Vanda Pignato, exprimera Dama de la República y en la actualidad Secretaria de Inclusión Social.
Representantes de la iglesia revelaron que el culpable de los presuntos delitos era Monseñor Jesús Delgado, quien habría abusado de sexualmente de una niña de ocho años de edad, la cual en la actualidad tiene 42 años. Pero en la denuncia consta que fue abusada desde los 8 a los 17 años de edad.
El arzobispo Escobar Alas, por otra parte, solicitó a la Asamblea Legislativa suprimir la prescripción de los delitos de abuso sexual a niños, niñas y adolescentes, dado que la ley actual contempla la prescripción de dichos delitos a los 10 años de haberse cometido.
Finalmente el arzobispo apuntó: “Me comprometo con todas mis fuerzas a luchar contra estos crímenes en la diócesis y me comprometo con todas mis fuerzas a proteger a los niños y las niñas, pues son lo más valioso que Dios nos ha dado. Exijo a la Asamblea Legislativa suprimir la prescripción del delito de abuso sexual a menores de edad para que sean castigados”.EL PAIS