La policía detuvo en Bruselas a dos personas sospechosas de preparar atentados en la capital belga durante las fiestas de fin de año, indicó este martes la fiscalía.
Esas "serias" amenazas de atentados apuntaban "a varios lugares emblemáticos de Bruselas (...) durante las fiestas de fin de año", indicó la fiscalía en un comunicado.
Los sospechosos fueron detenidos después de una serie de registros llevados a cabo el domingo y el lunes en la región de Bruselas, el Brabante Flamenco (que rodea la capital) y en la región de Lieja (este), a petición de un juez antiterrorista.
Los registros no tenían ningún "vínculo con los atentados" yihadistas de París, que dejaron 130 muertos el pasado 13 de noviembre, precisó la fiscalía.
La policía interrogó a los dos detenidos junto a otras cuatro personas que fueron liberadas.
El fiscal acusa a uno de los sospechosos de "amenazas de atentados, participación en las actividades de un grupo terrorista como dirigente y reclutamiento con vistas a cometer infracciones terroristas", indicó la fiscalía.
El otro fue detenido por "amenazas de atentados y participación en las actividades de un grupo terrorista".
Las autoridades judiciales no revelaron ningún detalle sobre la identidad de los arrestados y no indicaron el lugar en el que fueron detenidos, ya que la investigación sigue adelante.
Ropa militar y propaganda del EI
Los agentes no encontraron armas ni explosivos en los registros, y sólo se incautaron "material informático, ropa de entrenamiento de tipo militar y material de propaganda del grupo yihadista Estado Islámico".
En ese contexto, Bélgica subió el lunes el nivel de alerta terrorista para "los policías y los militares presentes en Bruselas, que podrían ser blancos simbólicos", dijo el portavoz de la Organización de Coordinación para el Análisis de la Amenaza (OCAM) a la AFP.
Bruselas, que alberga las instituciones de la Unión Europea y la sede de la OTAN, se encuentra en nivel de alerta antiterrorista 3 (de una escala de 4) desde finales de noviembre, al igual que el resto del país.
La capital belga estuvo seis días en el máximo nivel de alerta por un riesgo de atentado "serio e inminente" en noviembre, después de que se descubriera que varios autores de los atentados de París eran originarios de Bruselas, entre ellos uno de los principales sospechosos, Salah Abdeslam, que sigue huido.
Perseguido por todas las policías de Europa, se considera que transportó a los kamikazes que se hicieron estallar en el Estadio de Francia el 13 de noviembre, antes de llamar a dos amigos bruselenses que lo condujeron a Bélgica. Su hermano Brahim se hizo explotar ante un bar aquella noche.
"Tenemos en cuenta que puede seguir en Bélgica porque es una de las posibilidades", declaró el ministro del Interior, Jan Jambon, al diario belga Le Soir.
Nueve personas fueron inculpadas en Bélgica por los atentados de París. La policía también busca a Mohamed Abrini, sospechoso de acompañar a Salah Abdeslam a la capital francesa dos días antes de los ataques.AFP