Seis años después del terremoto que devastó Haití, unas 60.000 personas siguen aún viviendo en campamentos de desplazados, señaló este viernes la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA).
El sismo de enero de 2010 causó la muerte de más de 200.000 personas y dejó sin hogar a al menos 1,5 millones más.
Desde entonces, el país caribeño ha logrado avances importantes en el proceso de reconstrucción, apoyado por la comunidad internacional. Entre ellos figura la reubicación en viviendas de un 96% de los damnificados.
El jefe de OCHA en Haití, Enzo di Taranto, reconoció estos progresos, pero subrayó que cerca de 60.000 personas viven aún en campamentos para desplazados y precisan asistencia humanitaria.
Añadió que desde junio del año pasado se ha detectado un deterioro de la situación humanitaria y un resurgimiento de los casos de cólera.
Di Taranto mencionó además que la sequía provocada por los efectos del fenómeno El Niño ha dificultado el acceso a los alimentos a unos 3 millones de personas.
