La ambientalista hondureña Berta Cáceres fue asesinada "por su trabajo", dijo el director de la Agencia Técnica de Investigación Criminal (ATIC) del Ministerio Público de Honduras, Ricardo Castro.
"Las líneas -de la investigación- se van a ver el viernes, pero sí les puedo decir que es por su trabajo", indicó Castro sobre el asesinato de Cáceres, en declaraciones a periodistas en Tegucigalpa.
La escueta declaración del funcionario coincide con lo que han señalado familiares de Cáceres y diversas organizaciones ambientalistas, que su muerte ha sido por defender los recursos naturales del occidente del país.
Cáceres, quien además era defensora de derechos humanos y coordinadora general del Comité Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (Copinh), fue asesinada hace dos meses, el 3 de marzo, en la ciudad de La Esperanza, occidente del país.
En la víspera del segundo mes de su asesinato, en una operación de la ATIC coordinada por el Ministerio Público, fueron capturados cuatro hombres, entre los que figuran un oficial militar activo, otro retirado y un empleado de una empresa hidroeléctrica en el occidente del país a la que Cáceres se oponía.
Según Castro, el viernes, después de la audiencia, se podrían conocer los autores intelectuales y materiales del asesinato de Cáceres.
Señaló además que el ambientalista mexicano Gustavo Castro, único testigo de la muerte de Cáceres, de quien era huésped el día del crimen, "también sufrió un atentado" en ese hecho.
Gustavo Castro, por orden judicial, permaneció un mes en Honduras para que contribuyera con las autoridades a la investigación del asesinato de Cáceres. EFE