Un grupo de venezolanos opositores al Gobierno de su país y exiliados en Perú exigieron hoy al presidente Hugo Chávez romper las relaciones con Libia y hacer que su líder, Muamar el Gadafi, devuelva la réplica de la espada del Libertador Simón Bolívar.
El documento, suscrito por siete de los venezolanos exiliados basados en Lima -Nixon Moreno, Carlos Ortega, Oscar Pérez, Ramón Martínez, Carlos Barboza, Eduardo Lapi y Rodolfo Barraez-, todos ellos activistas opositores de Chávez, califica la acción del Gobierno de Gadafi contra los manifestantes en Libia como “matanza genocida”.
Los autodenominados “exiliados venezolanos” califican como “inaceptable” el “silencio cómplice” que Hugo Chávez mantiene “frente a la grave situación de violación de derechos humanos que se viene agravando cada día más en Libia”.
“Repudiamos que, mientras la comunidad internacional condena y deplora la criminal conducta asumida una vez más por el dictador Gadafi, el presidente Chávez se haga el desentendido”, agrega el documento.
Con esta actitud, según los firmantes del documento, “queda demostrada la doble moral del presidente venezolano, quien ha tenido el descaro de comparar a Gadafi con el libertador Simón Bolivar”.
En este sentido, el documento señala la necesidad de que Gadafi devuelva la réplica de la espada de Bolívar que le fue entregada por Chávez “injustamente”.
“Ya basta de complicidad con dictadores y terroristas que lo único que hacen es atropellar a sus pueblos”, finaliza el documento.
La réplica de la espada de Bolívar fue entregada por Chávez a Gadafi en el marco de la II Cumbre de América Latina-África realizada en septiembre de 2009 en la Isla de Margarita.
“Compañero presidente, esta es la réplica de la espada que libertó América hace 200 años. Es una joya, se la regalaron los pueblos a Bolívar (…) En nombre de nuestro pueblo, de la revolución bolivariana, te la entrego a ti (Gadafi), soldado revolucionario, líder del pueblo libio, de la revolución libia, de los pueblos de África y líder también para los pueblos de América Latina”, dijo entonces Chávez.
El gobernante venezolano fue aún más lejos y señaló que “lo que es Bolívar para nosotros, es Muamar el Gadafi para el pueblo libio”.
Más comedido, el pasado 30 de enero Chávez dijo que se había entrevistado con el líder libio para comentar la situación en los vecinos Túnez y Egipto.
“Gadafi me dijo que es bochornoso, que da como asco ver la intromisión de EE.UU. queriendo tomar el control, y fíjate cómo EE.UU., después que utilizó durante años a ese presidente (el tunecino Zine el Abidine Ben Alí), apenas entró en crisis lo abandonaron. Así paga el diablo, no le dieron ni visa al presidente de Túnez”, comentó Chávez.
EFE
El documento, suscrito por siete de los venezolanos exiliados basados en Lima -Nixon Moreno, Carlos Ortega, Oscar Pérez, Ramón Martínez, Carlos Barboza, Eduardo Lapi y Rodolfo Barraez-, todos ellos activistas opositores de Chávez, califica la acción del Gobierno de Gadafi contra los manifestantes en Libia como “matanza genocida”.
Los autodenominados “exiliados venezolanos” califican como “inaceptable” el “silencio cómplice” que Hugo Chávez mantiene “frente a la grave situación de violación de derechos humanos que se viene agravando cada día más en Libia”.
“Repudiamos que, mientras la comunidad internacional condena y deplora la criminal conducta asumida una vez más por el dictador Gadafi, el presidente Chávez se haga el desentendido”, agrega el documento.
Con esta actitud, según los firmantes del documento, “queda demostrada la doble moral del presidente venezolano, quien ha tenido el descaro de comparar a Gadafi con el libertador Simón Bolivar”.
En este sentido, el documento señala la necesidad de que Gadafi devuelva la réplica de la espada de Bolívar que le fue entregada por Chávez “injustamente”.
“Ya basta de complicidad con dictadores y terroristas que lo único que hacen es atropellar a sus pueblos”, finaliza el documento.
La réplica de la espada de Bolívar fue entregada por Chávez a Gadafi en el marco de la II Cumbre de América Latina-África realizada en septiembre de 2009 en la Isla de Margarita.
“Compañero presidente, esta es la réplica de la espada que libertó América hace 200 años. Es una joya, se la regalaron los pueblos a Bolívar (…) En nombre de nuestro pueblo, de la revolución bolivariana, te la entrego a ti (Gadafi), soldado revolucionario, líder del pueblo libio, de la revolución libia, de los pueblos de África y líder también para los pueblos de América Latina”, dijo entonces Chávez.
El gobernante venezolano fue aún más lejos y señaló que “lo que es Bolívar para nosotros, es Muamar el Gadafi para el pueblo libio”.
Más comedido, el pasado 30 de enero Chávez dijo que se había entrevistado con el líder libio para comentar la situación en los vecinos Túnez y Egipto.
“Gadafi me dijo que es bochornoso, que da como asco ver la intromisión de EE.UU. queriendo tomar el control, y fíjate cómo EE.UU., después que utilizó durante años a ese presidente (el tunecino Zine el Abidine Ben Alí), apenas entró en crisis lo abandonaron. Así paga el diablo, no le dieron ni visa al presidente de Túnez”, comentó Chávez.
EFE
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