La ministra española de Asuntos Exteriores, Trinidad Jiménez, confirmó hoy que el Gobierno de Irán aún no se ha disculpado por la detención el lunes del cónsul de España en Teherán, Ignacio Pérez Cambra.
“Hasta el momento no hemos recibido respuesta y desde luego que si no recibimos una respuesta satisfactoria a un hecho que consideramos muy grave, el Gobierno de España está considerando llamar a consultas al embajador de España” en Irán, manifestó.
Jiménez hizo estas declaraciones en una conferencia de prensa en Londres junto al ministro británico de Asuntos Exteriores, William Hague, quien expresó el respaldo a España en este asunto.
La ministra española de Exteriores subrayó que su Gobierno considera lo ocurrido como “muy grave e inaceptable” y que, por esta razón, la primera decisión fue llamar al embajador de Irán en Madrid “para que nos diera ciertas explicaciones”.
“Al mismo tiempo, nuestro embajador en Teherán envió una nota verbal al ministerio de Asuntos Exteriores de Irán para que nos dieran alguno tipo de explicación”, explicó Jiménez.
“Un hecho tan grave -agregó la ministra- requiere de una respuesta clara de las autoridades iraníes”.
El pasado martes, en declaraciones en el Parlamento, la jefa de la diplomacia dio un plazo de 48 horas a Teherán para que diera esas explicaciones, pero el plazo vence hoy y no ha habido respuesta.
Jiménez acusó entonces a Irán de “violar” el Convenio de Viena, que regula las relaciones diplomáticas, al arrestar a un consejero sin comunicarle “en ningún momento” los motivos, pese a que Pérez Cambra acreditó desde el principio su cargo.
El cónsul fue detenido por varios policías de paisano cuando se hallaba en los aledaños de la embajada española, situada en el norte de la capital iraní, y llevado a una comisaría de extranjería pese a haberse identificado como diplomático.
El encargado de Asuntos Consulares fue liberado casi cuatro horas y media después, sin que se le imputara ningún tipo de delito.
Hague recordó que Londres no tiene embajador en Irán, país con el que mantiene una tensa relación, pero subrayó que el Gobierno británico rechaza con contundencia lo ocurrido y apoya a España.
Pese al incidente con Irán, la jefa de la diplomacia española defendió mantener la actual política de la Unión Europea (UE) con respecto a Teherán, consistente en mantener abierta la vía del diálogo político sin renunciar a la imposición de sanciones. EFE
“Hasta el momento no hemos recibido respuesta y desde luego que si no recibimos una respuesta satisfactoria a un hecho que consideramos muy grave, el Gobierno de España está considerando llamar a consultas al embajador de España” en Irán, manifestó.
Jiménez hizo estas declaraciones en una conferencia de prensa en Londres junto al ministro británico de Asuntos Exteriores, William Hague, quien expresó el respaldo a España en este asunto.
La ministra española de Exteriores subrayó que su Gobierno considera lo ocurrido como “muy grave e inaceptable” y que, por esta razón, la primera decisión fue llamar al embajador de Irán en Madrid “para que nos diera ciertas explicaciones”.
“Al mismo tiempo, nuestro embajador en Teherán envió una nota verbal al ministerio de Asuntos Exteriores de Irán para que nos dieran alguno tipo de explicación”, explicó Jiménez.
“Un hecho tan grave -agregó la ministra- requiere de una respuesta clara de las autoridades iraníes”.
El pasado martes, en declaraciones en el Parlamento, la jefa de la diplomacia dio un plazo de 48 horas a Teherán para que diera esas explicaciones, pero el plazo vence hoy y no ha habido respuesta.
Jiménez acusó entonces a Irán de “violar” el Convenio de Viena, que regula las relaciones diplomáticas, al arrestar a un consejero sin comunicarle “en ningún momento” los motivos, pese a que Pérez Cambra acreditó desde el principio su cargo.
El cónsul fue detenido por varios policías de paisano cuando se hallaba en los aledaños de la embajada española, situada en el norte de la capital iraní, y llevado a una comisaría de extranjería pese a haberse identificado como diplomático.
El encargado de Asuntos Consulares fue liberado casi cuatro horas y media después, sin que se le imputara ningún tipo de delito.
Hague recordó que Londres no tiene embajador en Irán, país con el que mantiene una tensa relación, pero subrayó que el Gobierno británico rechaza con contundencia lo ocurrido y apoya a España.
Pese al incidente con Irán, la jefa de la diplomacia española defendió mantener la actual política de la Unión Europea (UE) con respecto a Teherán, consistente en mantener abierta la vía del diálogo político sin renunciar a la imposición de sanciones. EFE
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