Unas cuatro mil personas, según los organizadores, se concentraron hoy en la céntrica calle Alktomány (Constitución) de Budapest para protestar contra la nueva Carta Magna redactada a iniciativa del Gobierno húngaro y que la oposición y varios colectivos civiles consideran que limita las libertades.
Varios oradores, representantes de organizaciones civiles y ONG, pidieron que el Parlamento no apruebe el próximo lunes la constitución y denunciaron que haya sido redactada por un solo partido, el conservador Fidesz, que controla dos tercios de la Cámara.
Así, el presidente de la Unión para las Libertades Fundamentales (TASZ), Balázs Dénes, animó a la desobediencia civil y afirmó: "Para defender los valores democráticos todos debemos convertirnos en anti-constitucionalistas".
Organizaciones de homosexuales como "Megyek!", consideran que la definición del matrimonio como la unión entre un hombre y una mujer que recoge la Carta Marga degrada a los gays y lesbianas a una ciudadanía de segunda categoría.
También participaron en el mitin representantes de organizaciones gitanas, que llamaron la atención sobre la eliminación de la figura del defensor del pueblo para asuntos romanís que contempla la nueva ley fundamental.
"No lo apruebe, no lo firme,", fue el mensaje que los organizadores lanzaron a los diputados.
La nueva Constitución ha sido criticada por todas las fuerzas de la oposición, al entender que aumenta el poder del Gobierno y limita la capacidad de control de organismos como el Tribunal Constitucional.
El texto, que se encomienda a Dios, la Corona de Hungría, el orgullo patrio, la cristiandad y la familia tradicional, está hecho "a medida" -según denuncian asociaciones civiles- para el partido Fidesz que dirige el primer ministro Viktor Orbán.
La protesta fue convocada a través de la red social Facebook por el mismo grupo que organizó las manifestaciones contra la ley de medios, que fue duramente criticada por la propia Unión Europea.
EFE
Varios oradores, representantes de organizaciones civiles y ONG, pidieron que el Parlamento no apruebe el próximo lunes la constitución y denunciaron que haya sido redactada por un solo partido, el conservador Fidesz, que controla dos tercios de la Cámara.
Así, el presidente de la Unión para las Libertades Fundamentales (TASZ), Balázs Dénes, animó a la desobediencia civil y afirmó: "Para defender los valores democráticos todos debemos convertirnos en anti-constitucionalistas".
Organizaciones de homosexuales como "Megyek!", consideran que la definición del matrimonio como la unión entre un hombre y una mujer que recoge la Carta Marga degrada a los gays y lesbianas a una ciudadanía de segunda categoría.
También participaron en el mitin representantes de organizaciones gitanas, que llamaron la atención sobre la eliminación de la figura del defensor del pueblo para asuntos romanís que contempla la nueva ley fundamental.
"No lo apruebe, no lo firme,", fue el mensaje que los organizadores lanzaron a los diputados.
La nueva Constitución ha sido criticada por todas las fuerzas de la oposición, al entender que aumenta el poder del Gobierno y limita la capacidad de control de organismos como el Tribunal Constitucional.
El texto, que se encomienda a Dios, la Corona de Hungría, el orgullo patrio, la cristiandad y la familia tradicional, está hecho "a medida" -según denuncian asociaciones civiles- para el partido Fidesz que dirige el primer ministro Viktor Orbán.
La protesta fue convocada a través de la red social Facebook por el mismo grupo que organizó las manifestaciones contra la ley de medios, que fue duramente criticada por la propia Unión Europea.
EFE
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