La señora Luisa Figueroa, de 48 años de edad, vive exactamente en la redoma de El Indio, al lado del Lago de Valencia, en Aragua. Figueroa fue operada de un prolaxo, y por la crecida del lago, asegura haber sufrido infecciones. No la auxilia ni la atiende nadie. Tiene 4 hijos y actualmente reside, en calidad de invasora, en la casa comunal de El Indio, en Brisas del Lago, en Maracay, pues no tiene vivienda propia.
Hay otras situaciones similares que están viviendo otras familias que viven cerca del lago, el cual se encuentra creciendo, y los hogares pobremente construidos, más la basura, generan un ambiente pernicioso para la salud de los habitantes de la zona.
Figueroa tiene que, literalmente, pescar su sustento: ella y sus hijos comen peces y babas del lago porque no tienen fuente de ingreso.
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