En el Aula Magna de la Universidad Central de Venezuela se desarrolla una asamblea general de profesores en la cual los miembros del cuerpo docente debaten sobre si irse a paro indefinido o si intensificar las protestas por partes del gremio para reclamar, principalmente, tres cosas: mejoras laborales y salariales, que se atienda el tema de la homologación, y que también se trabaje para garantizar la seguridad en las universidades.
El debate entre los profesores es diverso y varios de ellos han presentado sus propuestas ante el resto de los asistentes. Por ejemplo, el profesor Carlos Colina, de la facultad de humanidades, opina que el plan que vayan a seguir debe incluir a todas las universidades nacionales y que debe incluir una política comunicacional común y coherente. Colina aboga la realización de una resistencia creativa en la calle y en las aulas, dedicándole una sección de las clases a la formación ciudadana.
Diego Scharifker, presidente de la FCU de la Universidad Central de Venezuela, señaló que él, como dirigente estudiantil, nunca va a estar de acuerdo con lo que signifique perder clases pero que él está allí para que los jóvenes pudiesen activarse en conjunto con los profesores y así poder colaborar con ellos. “Veremos como podemos ayudar”, dijo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario