El ex jefe de comunicación del primer ministro británico David Cameron, Andy Coulson, fue detenido el viernes por el escándalo de las escuchas del News of the World, tras el anuncio de una investigación para "llegar al fondo" de un asunto que afecta a la prensa, la policía y la política.
Coulson, redactor jefe del dominical sensacionalista entre 2003 y 2007, fue arrestado en conexión con "acusaciones de corrupción y de intervención de teléfonos" cuando se presentó por la mañana a una cita concertada en una comisaría del sur de Londres, anunció Scotland Yard en un comunicado.
Las acusaciones de corrupción están relacionadas con presuntos pagos a policías a cambio de información.
Salpicado por el escándalo, Coulson tuvo que dimitir en enero pasado de su cargo de jefe de comunicación de Cameron tras las crecientes revelaciones sobre los 'pinchazos' llevados a cabo cuando era redactor jefe del semanario propiedad del magnate australo-estadounidense Rupert Murdoch.
En 2007 había tenido que renunciar a este cargo a raíz de la condena a penas de prisión de un periodista, Clive Goodman, y un detective, Glenn Mulcaire, del News of the World, al término de una primera investigación, por haber intervenido los teléfonos de los príncipes Guillermo y Enrique, nietos de la Reina Isabel II.
Goodman, especialista en cuestiones de realeza, fue nuevamente arrestado este viernes en conexión con "acusaciones de corrupción" en su domicilio de Surrey (sur de Londres) y traslado a una comisaría del sur de la capital.
La detención de Coulson aumenta la presión sobre el primer ministro conservador, muy criticado por haberle contratado a pesar de sus vínculos con el escándalo que estalló en 2006.
Cameron declaró este viernes que decidió "darle una segunda oportunidad", y asumió "la plena responsabilidad" por haberlo contratado, en una rueda de prensa convocada de manera precipitada al día siguiente del anuncio del cierre del News of the World tras su última edición el domingo.
Respecto a la predecesora de Coulson al frente de la redacción y hoy directora de la filial británica del conglomerado de Murdoch, Rebekah Brooks, Cameron dijo que si es cierta la información de prensa de que presentó el jueves su dimisión, él "la hubiera aceptado", pero precisó que no correspondía al primer ministro determinar quién "debe dirigir los medios de comunicación".
El primer ministro anunció sin embargo la apertura de una investigación pública, presidida por un juez, sobre las prácticas "totalmente inaceptables" del News of the World.
"No quedará piedra sin remover", prometió en respuesta a la indignación que provocaron las nuevas revelaciones surgidas esta semana.
El caso de las escuchas, que inicialmente afectaba esencialmente a políticos y famosos, tomó un nuevo giro siniestro esta semana al revelarse que familiares de víctimas de crímenes, de los atentados terroristas de Londres o incluso de soldados muertos en Irak o en Afganistán pudieron sufrir 'pinchazos'.
Lo que más indignación causó fue la posibilidad de que un detective empleado del semanario pudiera haber intervenido en 2002 el buzón del teléfono de una adolescente desaparecida, que luego apareció muerta, e incluso borrado algunos mensajes, haciendo creer a familiares e investigadores que podía estar viva.
La nueva investigación pública, que no se sabe cuando comenzará a trabajar, se cabo en paralelo a las pesquisas de la policía, que ha estimado las posibles víctimas de las escuchas en hasta 4.000.
Además, habrá una segunda investigación para examinar la ética y la cultura de la prensa, que debería iniciar sus trabajos "idealmente este verano" boreal para "sacar las lecciones para el futuro, según dijo Cameron.
"Este escándalo no es sólo sobre algunos periodistas en un periódico. No es ni siquiera sólo sobre la prensa. Es también sobre la policía. Y sí, es también sobre como funciona la política y los políticos", agregó. "Estas investigaciones nos dan la posibilidad de empezar de nuevo y quiero que la aprovechemos.
El ex periodista del News of the World Clive Goodman, condenado a cuatro meses de cárcel en 2007, fue nuevamente detenido este viernes por el escándalo de las escuchas practicadas por el semanario sensacionalista británico, anunció la policía.
Las acusaciones de corrupción están relacionadas con presuntos pagos a policías a cambio de información.
Salpicado por el escándalo, Coulson tuvo que dimitir en enero pasado de su cargo de jefe de comunicación de Cameron tras las crecientes revelaciones sobre los 'pinchazos' llevados a cabo cuando era redactor jefe del semanario propiedad del magnate australo-estadounidense Rupert Murdoch.
En 2007 había tenido que renunciar a este cargo a raíz de la condena a penas de prisión de un periodista, Clive Goodman, y un detective, Glenn Mulcaire, del News of the World, al término de una primera investigación, por haber intervenido los teléfonos de los príncipes Guillermo y Enrique, nietos de la Reina Isabel II.
Goodman, especialista en cuestiones de realeza, fue nuevamente arrestado este viernes en conexión con "acusaciones de corrupción" en su domicilio de Surrey (sur de Londres) y traslado a una comisaría del sur de la capital.
La detención de Coulson aumenta la presión sobre el primer ministro conservador, muy criticado por haberle contratado a pesar de sus vínculos con el escándalo que estalló en 2006.
Cameron declaró este viernes que decidió "darle una segunda oportunidad", y asumió "la plena responsabilidad" por haberlo contratado, en una rueda de prensa convocada de manera precipitada al día siguiente del anuncio del cierre del News of the World tras su última edición el domingo.
Respecto a la predecesora de Coulson al frente de la redacción y hoy directora de la filial británica del conglomerado de Murdoch, Rebekah Brooks, Cameron dijo que si es cierta la información de prensa de que presentó el jueves su dimisión, él "la hubiera aceptado", pero precisó que no correspondía al primer ministro determinar quién "debe dirigir los medios de comunicación".
El primer ministro anunció sin embargo la apertura de una investigación pública, presidida por un juez, sobre las prácticas "totalmente inaceptables" del News of the World.
"No quedará piedra sin remover", prometió en respuesta a la indignación que provocaron las nuevas revelaciones surgidas esta semana.
El caso de las escuchas, que inicialmente afectaba esencialmente a políticos y famosos, tomó un nuevo giro siniestro esta semana al revelarse que familiares de víctimas de crímenes, de los atentados terroristas de Londres o incluso de soldados muertos en Irak o en Afganistán pudieron sufrir 'pinchazos'.
Lo que más indignación causó fue la posibilidad de que un detective empleado del semanario pudiera haber intervenido en 2002 el buzón del teléfono de una adolescente desaparecida, que luego apareció muerta, e incluso borrado algunos mensajes, haciendo creer a familiares e investigadores que podía estar viva.
La nueva investigación pública, que no se sabe cuando comenzará a trabajar, se cabo en paralelo a las pesquisas de la policía, que ha estimado las posibles víctimas de las escuchas en hasta 4.000.
Además, habrá una segunda investigación para examinar la ética y la cultura de la prensa, que debería iniciar sus trabajos "idealmente este verano" boreal para "sacar las lecciones para el futuro, según dijo Cameron.
"Este escándalo no es sólo sobre algunos periodistas en un periódico. No es ni siquiera sólo sobre la prensa. Es también sobre la policía. Y sí, es también sobre como funciona la política y los políticos", agregó. "Estas investigaciones nos dan la posibilidad de empezar de nuevo y quiero que la aprovechemos.
El ex periodista del News of the World Clive Goodman, condenado a cuatro meses de cárcel en 2007, fue nuevamente detenido este viernes por el escándalo de las escuchas practicadas por el semanario sensacionalista británico, anunció la policía.
Goodman, especialista en temas de realeza, fue arrestado en su domicilio de Surrey (sur de Londres) en relación con "acusaciones de corrupción" vinculadas a presuntos pagos a policías, y trasladado a una comisaría del sur de la capital, precisó en un comunicado.
El ex periodista de News of the World había sido encarcelado en 2007 junto con un detective privado que trabajaba para el periódico, Glenn Mulcaire, por haber intervenido los teléfonos de los príncipes Guillermo y Enrique, nietos de la reina Isabel II.
Goodman, de 53 años, es la segunda persona detenida este viernes después del ex jefe de comunicación del primer ministro David Cameron, Andy Coulson, quien fue redactor jefe del popular semanario cuando ocurrieron las escuchas.
El caso de las escuchas telefónicas ilegales por parte del News of the World, que estalló en 2006 e inicialmente afectaba esencialmente a figuras políticas y famosos, suscitó una oleada de indignación esta semana al revelarse que familiares de víctimas de crímenes, atentados terroristas o incluso soldados muertos en Irak o en Afganistán pudieron sufrir "pinchazos".
La policía, que inició una nueva investigación sobre el caso a principios de año, estimó que las presuntas víctimas de las escuchas podrían llegar a 4.000.
AFP