El Programa Europeo de Apoyo entre Iguales SHE, ha propuesto que sean las personas infectadas con el VIH quienes ayuden a los nuevos pacientes con la enfermedad a mejorar su calidad de vida, el anunció fue hecho en Roma durante la VI Conferencia de la Sociedad Internacional de Sida (IAS).
Según la doctora, que tiene sida desde hace 21 años y ha participado en la redacción del programa SHE junto a otras mujeres infectadas y personal sanitario de seis países europeos, el que presta ayuda conoce perfectamente los problemas del que la precisa porque ha pasado por situaciones y dificultades similares.
"Cuando una persona se contagia, le asaltan tres grandes temores: ¿Cuándo me voy a morir?, ¿qué me va a pasar si inicio el tratamiento? y ¿quién me va a querer a partir de ahora?", señala Fuster, quien insiste en que al tratar directamente con "un igual" muchos de los miedos que tiene el paciente desaparecen.
"Ven que estás bien y se convencen de que es posible", añade Fuster, antes de precisar que la red de apoyo es "fundamental" para afrontar la enfermedad y el tratamiento contra el sida, que, según los últimos estudios, es efectivo en el 96 por ciento de los casos.
Todavía no se ha precisado cómo será la implantación del programa SHE en España, pero Fuster avanza que la idea es incorporar, a partir del próximo año, a personas con VIH en las unidades de sida de los hospitales españoles, aunque reconoce que la iniciativa puede suscitar cierto rechazo entre el personal sanitario.
"Hay barreras estructurales, económicas y también de confianza
"Hay barreras estructurales, económicas y también de confianza
porque todavía hay muchos prejuicios en torno a la posibilidad de trabajar en un hospital con una persona con VIH", indica la psicóloga social, quien espera que este programa ayude a "normalizar" la enfermedad y a que desaparezca la "discriminación".
EFE