AVN .- La invasión a Irak, la desestabilización en Irán, los recientes episodios en Libia y las pretensiones de desestabilización en Venezuela son parte de las respuestas desesperadas ante la crisis económica por la que atraviesa Estados Unidos y los países europeos, dijo el ministro de para Energía y Petróleo, Rafael Ramírez.
Este domingo en el programa “José Vicente Hoy” transmitido por Televen, Ramírez señaló que la situación de crisis por la que atraviesan esos países afectan principalmente a los petroleros, ya que uno de los factores que mueven a las naciones industrializadas es la energía.
La economía norteamericana consume el 25% de la energía de todo el mundo, y los europeos son, igualmente, altos consumidores, indicó el Ministro.
“Es evidente que el capitalismo mundial y sus países más desarrollados está pasando por una crisis estructural severa; ya tuvimos un episodio precedente en el año 2008, cuando hubo toda la crisis en la economía norteamericana, que produjo la burbuja especulativa y dejó a cientos de miles de norteamericanos sin hogar, y que aún viven en vehículo; y ahora esta crisis que se ha extendido a los países europeos y a sus periferia”, acotó.
Ramírez señaló que “Europa está siendo arrastrada por una situación social sin precedente, pero además tiene una expresión económica donde el petróleo es una parte fundamental de esta ecuación”.
De acuerdo con Ramírez, esta situación actual de la economía norteamericana y europea hace que tenga “una expresión política y muchas veces militar“.
Contó que uno de los ejemplos es lo sucedido en Irak, donde acaba de culminar un proceso “de festín de la grandes empresas”, entre ellas la Exxon Móbil.
“Ahí se repartieron las reservas de Irak con la promesa de llevar la producción hasta 12 millones de barriles diarios de petróleo. Un asunto donde los grandes países, a través de las transnacionales, expropian los recursos del pueblo”.
A juicio del Ministro esa situación se repite en Libia, con el permanente hostigamiento y sanciones en contra de Irán y Venezuela, donde uno de los episodios fue el Golpe de Estado de 2002, que tuvo la participación de Estados Unidos, y, actualmente, los últimos capítulos de sanciones a la empresa nacional Petróleos de Venezuela.
En la nación venezolana “también hay pretensiones de las empresas transnacionales de poner una especie de castigo al desarrollo de nuestras políticas soberanas en materia petrolera”, añadió.