Diputados de la subcomisión de salud están reunidos con la directiva de Policlínica Santiago de León para conocer la situación de ese centro asistencial, luego de que 300 trabajadores denunciaran la quiebra y la búsqueda de acuerdos sobre sueldos, tickets de alimentación y prestaciones sociales.
Aparte de los representantes de la clínica y sus trabajadores, están presentes funcionarios del Ministerio Público, del Ministerio de Salud y del Indepabis.
Rafael Tirado, director y presidente de la Policlínica Santiago de León, aceptó que se le debe dinero a los trabajadores, pero aclara que es por falta de producción, de flujo de caja y por falta de pago por parte de empresas aseguradoras y empresas del Estado como Corpoelec.
"Cuando una empresa necesita 5 millones y medio de bolívares y producimos menos de uno cómo hacemos? Tenemos nómina de un millardo y medio de bolívares mensuales, incluyendo tickets de alimentación, con una producción mensual de un millón. La quincena pasada la pagamos yendo a las empresas de seguro, del Estado, rasguñando”, dijo.
Informó que no han podido cancelar tickets de alimentación porque no tienen flujo de caja.
Aclaró que más de 70% de las acciones de la clínica están en venta, a disposición de los médicos y que Pdvsa ha mostrado su intención de comprar la empresa pero aún están esperando.
Juana Camacho tiene 19 años trabajando en la Santiago de León y dice que no tiene respaldo de antigüedad y no le cubren prestaciones sociales. "A nosotros no nos importa las personas ineptas que pusieron a hacer cálculos. Lo que queremos es el dinero.
La quincena, tickets. Somos casi sueldo mínimo. Lo que pedimos es que se resuelva y no con un cierre, sino que vendan".
Gisela Pérez, doctora, dijo que una clínica sin médicos no puede salir adelante y ese es el principal problema. "En marzo de 2011 emitimos un comunicado donde les decíamos hemos de nuestra imposibilidad de ejercer nuestros servicios médicos por el estado de la clínica".