Un tribunal de Amsterdam comenzó hoy a juzgar al presunto pederasta holandés, Robert M., acusado de haber abusado de 67 niños menores de 4 años en dos guarderías de esa capital y en domicilios particulares donde prestaba servicios como canguro.
El hombre, de 28 años, también está acusado de posesión de grandes cantidades de material fotográfico y vídeos con pornografía infantil que distribuía entre una red internacional de pederastas, que incluía países como Estados Unidos, Gran Bretaña, Suecia y Alemania.
Desde su arresto en diciembre de 2010, el acusado, que se ha negado a ser reconocido psicológicamente, ha confesado los abusos de los menores, algunos de los cuales fueron víctima de violaciones.
El juicio, que se prolongará previsiblemente durante unas seis semanas, ha empezado con cuestiones de procedimiento referidas al derecho de los padres de las víctimas a hablar durante las sesiones judiciales.
La tramitación de los casos de los 67 menores, que se espera empiece esta tarde, se hará a puerta cerrada.
Junto al principal sospechoso, un joven homosexual nacido en Riga (Letonia), también se sienta en el banquillo su marido, de 38 años, con quien se casó en 2004 en Holanda.
El esposo de Robert M. está acusado de pornografía infantil y de complicidad en los delitos de su pareja.
Robert M. trabajaba en una guardería situada en un barrio de clase media en Amsterdam, pero además se ofrecía en internet como canguro a domicilio.
La detención de Robert M. se produjo después de que las autoridades holandesas recibiesen un aviso de las de EE. UU., las cuales habían identificado imágenes de pornografía infantil procedentes de Holanda durante una investigación internacional.