La ONG que investiga asuntos públicos y ambientales en China, IPE, ha acusado a 27 proveedores de Apple de contaminar el medio ambiente de las comunidades anexas a sus fábricas y de dañar la salud de los habitantes.
En su informe, titulado "la otra cara de Apple", la ONG detalló que de las 31 empresas multinacionales investigadas, Apple fue la que presentó mayores problemas de contaminación ambiental y la que se mostró menos dispuesta a colaborar.
El director de IPE, Ma Jun, dijo hoy a Efe que Apple promete ser verde, pero su comportamiento no ha sido suficiente y la empresa debe aceptar que la contaminación que emiten sus proveedores es también su responsabilidad.
"Apple debe velar por el cuidado ambiental y dejar de pensar solo en el precio; nosotros creemos que los productos de esta empresa son buenos y que por eso tienen un alto consumo, pero confiamos en que sus consumidores no estarían de acuerdo en comprar artículos que dañen al medio ambiente y la salud de mucha gente", añadió Ma.
El informe de IPE, presentado el miércoles pasado, se divulgó paralelamente a un vídeo que la ONG preparó para mostrar cómo el vertido de metales pesados en los lagos cercanos a algunas de las empresas proveedoras de Apple está contaminando muchas comunidades y atentando contra la salud de sus habitantes.
"Por favor ayúdennos, ya no podemos seguir viviendo así", afirman varios campesinos chinos en el vídeo, al tiempo que se arrodillan ante las cámaras de la ONG.
Antes de divulgar su informe, IPE se comunicó con Apple para conocer su opinión sobre los proveedores acusados.
La empresa reiteró su compromiso con una elevada responsabilidad social en toda la cadena de producción de sus artículos y aseguró que muchas de esas empresas no trabajan con ellos.
Apple invitó a la ONG a discutir más detalles, pero hasta la fecha la reunión no se ha concretado ya que la empresa de Cupertino no ha contestado el último correo. A este respecto, Efe ha intentado contactar con la compañía estadounidense sin conseguirlo.
Entre los problemas más serios que la empresa tuvo que afrontar en China está la ola de suicidios de varios de los trabajadores en las plantas de una de sus empresas proveedoras, la firma taiwanesa Foxconn, fabricante del iPad y del iPhone de Apple en 2010.
En el mismo año, la fama de Apple volvió a verse mellada después de que 137 obreros de otra de sus proveedoras, la compañía taiwanesa Wintek, resultaran intoxicados por estar expuestos a altos niveles de n-hexano, químico que daña el sistema nervioso periférico.
IPE fue fundada en mayo de 2006 con el objetivo de ayudar a expandir el acceso a la información ambiental en China mediante el desarrollo corporativo y la participación del público en ese campo.
Tras conocer los problemas de contaminación de los proveedores de Apple en China, la ONG planea trabajar junto al grupo ambientalista Nature Resources Defense Council (NRDC), con base en Nueva York, para promover, a través de los consumidores de Apple en los Estados Unidos, una mayor conciencia ecológica y social en la empresa.
En su informe, titulado "la otra cara de Apple", la ONG detalló que de las 31 empresas multinacionales investigadas, Apple fue la que presentó mayores problemas de contaminación ambiental y la que se mostró menos dispuesta a colaborar.
El director de IPE, Ma Jun, dijo hoy a Efe que Apple promete ser verde, pero su comportamiento no ha sido suficiente y la empresa debe aceptar que la contaminación que emiten sus proveedores es también su responsabilidad.
"Apple debe velar por el cuidado ambiental y dejar de pensar solo en el precio; nosotros creemos que los productos de esta empresa son buenos y que por eso tienen un alto consumo, pero confiamos en que sus consumidores no estarían de acuerdo en comprar artículos que dañen al medio ambiente y la salud de mucha gente", añadió Ma.
El informe de IPE, presentado el miércoles pasado, se divulgó paralelamente a un vídeo que la ONG preparó para mostrar cómo el vertido de metales pesados en los lagos cercanos a algunas de las empresas proveedoras de Apple está contaminando muchas comunidades y atentando contra la salud de sus habitantes.
"Por favor ayúdennos, ya no podemos seguir viviendo así", afirman varios campesinos chinos en el vídeo, al tiempo que se arrodillan ante las cámaras de la ONG.
Antes de divulgar su informe, IPE se comunicó con Apple para conocer su opinión sobre los proveedores acusados.
La empresa reiteró su compromiso con una elevada responsabilidad social en toda la cadena de producción de sus artículos y aseguró que muchas de esas empresas no trabajan con ellos.
Apple invitó a la ONG a discutir más detalles, pero hasta la fecha la reunión no se ha concretado ya que la empresa de Cupertino no ha contestado el último correo. A este respecto, Efe ha intentado contactar con la compañía estadounidense sin conseguirlo.
Entre los problemas más serios que la empresa tuvo que afrontar en China está la ola de suicidios de varios de los trabajadores en las plantas de una de sus empresas proveedoras, la firma taiwanesa Foxconn, fabricante del iPad y del iPhone de Apple en 2010.
En el mismo año, la fama de Apple volvió a verse mellada después de que 137 obreros de otra de sus proveedoras, la compañía taiwanesa Wintek, resultaran intoxicados por estar expuestos a altos niveles de n-hexano, químico que daña el sistema nervioso periférico.
IPE fue fundada en mayo de 2006 con el objetivo de ayudar a expandir el acceso a la información ambiental en China mediante el desarrollo corporativo y la participación del público en ese campo.
Tras conocer los problemas de contaminación de los proveedores de Apple en China, la ONG planea trabajar junto al grupo ambientalista Nature Resources Defense Council (NRDC), con base en Nueva York, para promover, a través de los consumidores de Apple en los Estados Unidos, una mayor conciencia ecológica y social en la empresa.
EFE