AVN).- “Desde que perdí mi pierna a los 26 años, hace un año y ocho meses, ha sido muy duro para mí adaptarme a una nueva vida, pero ahora estoy muy esperanzada por mi prótesis, con el favor de Dios, porque podré adquirir mayor movilidad, además quiero verme completa en el espejo”, expresó Jéssica Ricaurte.
Esta joven acudió al Laboratorio de Ortoprótesis del Hospital Dr. Francisco Antonio Rísquez, ubicado en Cotiza, parroquia San Juan, Caracas, para tomarse las medidas y así adquirir gratuitamente una prótesis de miembro inferior izquierdo, que perdió en un accidente automovilístico. El Ministerio para la Salud la refirió al momento en que solicitaba ayuda para unas muletas.
Este laboratorio recientemente rehabilitado comenzó a prestar sus servicios hace mes y medio, y con el que empezó a funcionar hace poco en el Hospital Universitario de Maracaibo, estado Zulia, ya son ocho los recintos de este tipo ubicados en varias partes del país.
Para personas como Jéssica, este tipo de servicios es vital: “Tengo dos hijos que han sido mi mayor motivación para seguir adelante. Actualmente vivo en un refugio y espero obtener pronto una vivienda digna; poco a poco, sé que mi vida se va a enderezar”.
El coordinador del laboratorio del hospital Rísquez, Giovanni Acosta, explicó que cuentan con una planta de siete estudiantes que se preparan como auxiliares de técnicos en ortoprótesis, un asistente ortoprotesista, cuatro técnicos venezolanos y cubanos, que hasta ahora han atendido cerca de 40 pacientes, entre toma de medidas y entrega definitiva de prótesis, mientras que en órtesis tienen estipulado cubrir una cifra de 20 a 25 mensual.
Aclaró que una prótesis es un dispositivo que sustituye algún miembro amputado, “mientras que la órtesis te va a asistir para movilizarte mejor, como un collarín o una férula”.
Señaló que lo más demandando es la prótesis de miembro inferior transfemoral(amputado por encima de la rodilla) y transtrivial (amputado por debajo de la rodilla).
Para ejecutar este trabajo, poseen sierras, fresadoras, un horno de alta tecnología, esmeriles, entre otros artefactos que son adquiridos en Alemania y otros son fabricados en el país.
Indicó que en el mercado una prótesis sencilla puede costar entre 20 mil y 25 mil bolívares; Sin embargo, Ricaurte contó que su dispositivo está costando alrededor 35.000 bolívares en centros privados.
“Estamos abiertos para recibir a quienes lo necesiten. No discriminamos“, enfatizó Giovanni Acosta.