"Fue una de esas oportunidades que se dan una vez en la vida. Un reto muy grande, un riesgo, pero me gusta que sea un personaje que va a provocar reacción. Si no, ¿cuál es el chiste?", dijo la estrella de cine y televisión a la agencia AP.
En este nuevo filme, la polifacética actriz mexicana da vida a Julio "Mousey" Ruiz, una matona de la unidad de la cárcel de Los Ángeles que alberga a homosexuales, lesbianas y transexuales.
Con escasa ropa, largas cejas pintadas, la melena alborotada y tatuajes en el pecho, los antebrazos y el ombligo, la actriz tiene aspecto amenazante y andrógino en el filme.
"Ella es básicamente la reina de K-11, es una mujer, transexual, que no se ha hecho todas las operaciones y que tiene una relación especial con el protagonista. Es una mujer llena de traumas psicológicos pero con una seguridad increíble, es drogadicta y violenta pero aprendes a quererla", indicó Del Castillo sobre su personaje.
La cinta también incluye escenas de violencia, drogas, violaciones y "todas las cosas normales" que hay en las cárceles, de acuerdo con la directora Jules Stewart.
"Este papel lo agradezco en el alma y pocas actrices han tenido esta oportunidad en su vida", dijo la también polémica “Reina del Sur”.
Para dar vida a Mousey, la actriz tuvo que empezar desde cero, pues no sabía mucho sobre transexuales en prisión.
"Antes de la película no estaba conectada con lo transexual. Leí todos los libros que pude y me aventé todas las pelis que pude y busqué información en Internet para ver eso que es como un mundo lejano para nosotros, sobre el cual hay mucha ignorancia", comentó.
La película “K-11” se terminó de filmar el año pasado y está en proceso de distribución