Marciano analiza en su columna de este martes cómo las encuestas muestran “la asimetría abismal” entre el candidato Hugo Chávez y su contendor Henrique Capriles Radonski “no porque Chávez lo quiera así, sino porque el otro no da la talla (…) la imagen de Chávez es demasiado poderosa mientras que la de Capriles se diluye, se esfuma”.
El columnista apunta que el candidato opositor sabe “que las empresas (encuestadoras) que avalan la aplastante ventaja de Chávez no son de maletín, no las manejan mercenarios ni incondicionales de Chávez. Todo lo contrario, la manejan personas que en su gran mayoría no están con con el Presidente (…)”.