El secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), Ángel Gurría, aseguró que Italia ha realizado "esfuerzos importantísimos", pero agregó que es "esencial" continuar adoptando reformas estructurales para superar la crisis.
Así se lee en la presentación redactada por Gurría del informe "Italia: Reanimar crecimiento y productividad" realizado por la OCDE y presentado hoy en Roma en la Conferencia Internacional sobre Reformas Estructurales organizada por este país.
Además, durante su intervención en esta conferencia, Gurría aseguró que estas reformas ya implementadas en Italia "podrían llevar al aumento de cuatro puntos del Producto Interior Bruto en los próximo diez años".
Gurría aplaudió el trabajo del presidente del Gobierno italiano, Mario Monti, del que dijo "ha tomado decisiones valientes" con las que se están "superando obstáculos que desde hace tiempo obstaculizaban el crecimiento de Italia".
"Han sido decisiones sin precedentes y Monti ha sido el hombre justo en el momento justo", agregó Gurría.
En la presentación del informe de la OCDE se explica que "en los últimos dos años, Italia ha realizado reformas valientes, ambiciosas y de amplio espectro (...) que han llevado a una mejoría del cuadro fiscal a medio plazo, medidas en materia laboral y algunas importantes liberalizaciones y medidas de simplificación del mercado de bienes, así como está en marcha un proyecto de ley anticorrupción".
Gurría añadió que estas medidas eran necesarias considerando "el impacto de la crisis financiera en Italia, así como en una fase en la que el crecimiento disminuye, al igual que la competitividad, y el déficit público es elevado".
Por ello, en su informe de 50 páginas, la OCDE anima a Italia a continuar con estas reformas que permitan a Italia responder con éxito al inmenso desafío de conseguir la sostenibilidad de las cuentas públicas, modernizando al mismo tiempo la economía, restaurando la competitividad y promoviendo la cohesión social".
"El buen resultado de este proceso es esencial no solo para Italia sino para toda Europa", añadió Gurria en su presentación.
Por otra parte, Gurría instó a los próximos gobiernos italianos a que "no cedan a la tentación de echar marcha atrás, desmontando las reformas ya implementadas", durante su intervención en Roma.
Así se lee en la presentación redactada por Gurría del informe "Italia: Reanimar crecimiento y productividad" realizado por la OCDE y presentado hoy en Roma en la Conferencia Internacional sobre Reformas Estructurales organizada por este país.
Además, durante su intervención en esta conferencia, Gurría aseguró que estas reformas ya implementadas en Italia "podrían llevar al aumento de cuatro puntos del Producto Interior Bruto en los próximo diez años".
Gurría aplaudió el trabajo del presidente del Gobierno italiano, Mario Monti, del que dijo "ha tomado decisiones valientes" con las que se están "superando obstáculos que desde hace tiempo obstaculizaban el crecimiento de Italia".
"Han sido decisiones sin precedentes y Monti ha sido el hombre justo en el momento justo", agregó Gurría.
En la presentación del informe de la OCDE se explica que "en los últimos dos años, Italia ha realizado reformas valientes, ambiciosas y de amplio espectro (...) que han llevado a una mejoría del cuadro fiscal a medio plazo, medidas en materia laboral y algunas importantes liberalizaciones y medidas de simplificación del mercado de bienes, así como está en marcha un proyecto de ley anticorrupción".
Gurría añadió que estas medidas eran necesarias considerando "el impacto de la crisis financiera en Italia, así como en una fase en la que el crecimiento disminuye, al igual que la competitividad, y el déficit público es elevado".
Por ello, en su informe de 50 páginas, la OCDE anima a Italia a continuar con estas reformas que permitan a Italia responder con éxito al inmenso desafío de conseguir la sostenibilidad de las cuentas públicas, modernizando al mismo tiempo la economía, restaurando la competitividad y promoviendo la cohesión social".
"El buen resultado de este proceso es esencial no solo para Italia sino para toda Europa", añadió Gurria en su presentación.
Por otra parte, Gurría instó a los próximos gobiernos italianos a que "no cedan a la tentación de echar marcha atrás, desmontando las reformas ya implementadas", durante su intervención en Roma.
Plan de ajuste
Por su parte, Monti explicó que sin su plan de ajuste (de un valor de 30.000 millones) conocido como "salva Italia", el país habría "perdido soberanía" ya que se han realizado "medidas incisivas".
Monti reiteró que el "final dramático" que se esperaba para Italia "ya está lejos" y que gracias a las medidas adoptadas Italia "ya no se encuentra en la lista de países con problemas en la Unión Europea".
Según las nuevas estimaciones del Gobierno publicadas la semana pasada, el Producto Interior Bruto (PIB) italiano se contraerá un 2,4 % en 2012, frente a la caída de un 1,2 % que había estimado, y elevan en nueve décimas, hasta el 2,6 % del PIB, su previsión de déficit público para 2012.
Monti aseguró que en 2013 la economía del país volverá a crecer y al igual que la OCDE consideró que también "el PIB aumentará cuatro puntos en los próximos diez años".
Asimismo anunció que "es demasiado pronto para abandonar la política del rigor, que tiene que seguir manteniéndose", añadió.
La ocasión sirvió a Monti a reiterar su intención de no presentarse a las próximas elecciones, previstas para abril de 2013, y aseguró que su mandato, que comenzó en noviembre pasado, terminará con los comicios.
El primer ministro italiano puso hincapié en la alta corrupción en Italia, que supone un "freno para el crecimiento del país" y que supera la media del resto de países de la OCDE, y recordó como su Ejecutivo prevé adoptar lo antes posible un proyecto de ley "anticorrupción".
Monti reiteró que el "final dramático" que se esperaba para Italia "ya está lejos" y que gracias a las medidas adoptadas Italia "ya no se encuentra en la lista de países con problemas en la Unión Europea".
Según las nuevas estimaciones del Gobierno publicadas la semana pasada, el Producto Interior Bruto (PIB) italiano se contraerá un 2,4 % en 2012, frente a la caída de un 1,2 % que había estimado, y elevan en nueve décimas, hasta el 2,6 % del PIB, su previsión de déficit público para 2012.
Monti aseguró que en 2013 la economía del país volverá a crecer y al igual que la OCDE consideró que también "el PIB aumentará cuatro puntos en los próximos diez años".
Asimismo anunció que "es demasiado pronto para abandonar la política del rigor, que tiene que seguir manteniéndose", añadió.
La ocasión sirvió a Monti a reiterar su intención de no presentarse a las próximas elecciones, previstas para abril de 2013, y aseguró que su mandato, que comenzó en noviembre pasado, terminará con los comicios.
El primer ministro italiano puso hincapié en la alta corrupción en Italia, que supone un "freno para el crecimiento del país" y que supera la media del resto de países de la OCDE, y recordó como su Ejecutivo prevé adoptar lo antes posible un proyecto de ley "anticorrupción".
EFE