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viernes, 21 de septiembre de 2012

Marine Le Pen a favor de prohibir el velo y la kipá en la calle


Marine Le Pen a favor de prohibir el velo y la kipá en la calleLa jefa del partido de ultraderecha francés Frente Nacional, Marine Le Pen, propuso prohibir el velo musulmán y la kipá judía en todos los espacios públicos, incluso en la calle, en una entrevista publicada el viernes por el diario Le Monde, en plena polémica suscitada por la divulgación de un vídeo islámofobo y caricaturas de Mahoma.

Marine Le Pen piensa que esos símbolos religiosos deben prohibirse en las "tiendas, los transportes, la calle" y considera que es "evidente que si se suprime el velo se suprima la kipá en el espacio público".

Al ser preguntada sobre el carácter "liberticida" de un proyecto así, Le Pen responde que "depende de lo que se considere como una libertad. Está prohibido pasearse desnudo en la calle... ¿Acaso eso es liberticida?", espeta.

En su proyecto para la elección presidencial de 2012, la presidenta del partido de la extrema derecha ya abogaba por la prohibición de "llevar el velo u otro símbolo religioso ostentoso", pero en "los servicios públicos administrativos dependientes del Estado o de las instancias territoriales" y anunciaba una "reflexión para ampliar esta disposición a los transportes públicos".

En Le Monde dice estar a favor de que se "aplique estrictamente la ley de 1905" sobre el laicismo: "No hay que financiar, directa o indirectamente a las mezquitas. Basta de financiación extranjera salvo en casos específicos de convención de reciprocidad".

"No me importa que un Estado financie una mezquita en nuestro país a condición de que no prohíba en su territorio la financiación de iglesias o de cualquier otro culto", agregó.

Fuera de estos casos, las mezquitas deben financiarse "con el dinero de los fieles".

En cuanto a las caricaturas de Mahoma publicadas por el semanario satírico francés Charlie Hebdo, a cuyo caricaturista Charb llevó a la justicia tras representarla como una eyección, Marine Le Pen no ve "el interés de atacar en lo más íntimo a la gente".

"Pero la posibilidad de provocación es un inconveniente de la libertad de expresión que de hecho, tiene muchas ventajas. Y la libertad de expresión, de la que depende la libertad de prensa, no se negocia", zanjó.
AFP