Ligia Reina, dueña del local que funcionaba como peluquería, relató que desde el 6 de septiembre la persona que tiene alquilada en el local entregó el mismo al colectivo y saco los muebles.
Su hijo y ella ya han puesto las denuncias en la Fiscalía y el Cicpc y todavía esperan una respuesta y que desalojen a las personas.
Los vecinos denuncian que la inseguridad en este sector se ha incrementado y que hasta el momento hay 28 tomas ilegales en la parroquia, por lo que piden a los entes municipales y a la policía que tomen medidas