efe-España y Portugal son los únicos países de la Unión Europea que aún conceden permisos especiales para retirar en alta mar las aletas de los tiburones que pescan, práctica sobre la que mañana vota el Parlamento Europeo y que hoy ha sido denunciada por grupos ecologistas que piden su erradicación total.
Tanto Ecologistas en Acción como el grupo "Shark Alliance" defienden la modificación propuesta a la ley de pesca por la Comisión Europea para que todos los tiburones sean desembarcados con sus aletas adheridas, de forma natural.
Esa restricción a la normativa actual, que permite dispensas como las que se emiten para pescadores españoles y portugueses, los principales en la zona, quiere evitar "vacíos" para que se continúe con la prohibida práctica del aleteo o "finning", por la que se descarta el cuerpo del tiburón, una vez que se le han cortado los apéndices.
"Seguiremos instando a todos los eurodiputados a eliminar toda confusión en el Pleno y así respaldar claramente una estricta política de la UE contra el cercenamiento de las aletas de tiburón en el mar, sin ninguna excepción", declaró a EFE Àlex Bartolí, coordinador político de la "Shark Alliance" en España.
Según Bartolí, aunque el aleteo está prohibido en la UE desde 2003, si se acepta la entrega de la carga diferenciada (cuerpos y aletas) en puertos distintos se abre un espacio velado al "finning".
Además, la deseada gestión de las especies de tiburón que corren especial peligro por la sobrepesca, como la tintorera (Prionace glauca) y el marrajo (Isurus oxyrinchus), es imposible si se permite que se separen aletas y cuerpos antes de desembarcar.
La normativa actual es "débil" y no se puede comprobar si los cuerpos de los tiburones, de los que España pesca 50 toneladas al año, se arrojan sin las aletas al mar para desangrarse, puntualizó.
La modalidad de captura con aletas adheridas, con cortes parciales que permiten que se replieguen sobre el cuerpo, es una tendencia mundial que se aplica con éxito en América, Australia y Asia y aún congelado, como se almacena el pescado, ya no son un peligro a bordo, por su filo, como apuntan los pescadores, precisó.
Ecologistas en Acción, a su vez, sostiene que la propuesta de la Comisión que se vota mañana en la Eurocámara "constituye un paso positivo hacia la altamente necesaria protección de los tiburones".
Las aletas de tiburón son el ingrediente primordial de una popular receta de sopa en Oriente, donde el kilo se vende por encima de los mil euros.
Se estima que hasta 73 millones de tiburones mueren en todo el mundo para satisfacer la demanda de aletas, un mercado en el que participa la Unión Europea con el 14 por ciento del total de pesca, estimado en 104 millones.
La propuesta que debatirá el Parlamento Europeo y en el Consejo de Ministros propone que todos los tiburones capturados por buques de la UE o en aguas comunitarias se desembarquen con las aletas adheridas de forma natural a sus cuerpos, sin excepciones.