Tras un 2012 en el que muchos debutantes irrumpieron con fuerza, Adele vuelve a figurar como la reina de la música grabada en estos últimos doce meses gracias a los más de 9 millones de copias distribuidas en ese tiempo de su disco "21", un álbum veterano que ya fue el fenómeno en ventas de 2011.
A falta de unos pocos días para cerrar el presente ejercicio, la web United World Charts, que aglutina datos de las listas de ventas oficiales de los mercados más importantes, le otorga esa corona a la británica, que se destaca con mucha ventaja frente a sus más inmediatos perseguidores, Taylor Swift y el grupo One Direction.
Swift, cuyo disco "Red" fue editado a finales de octubre, lleva siete semanas en el número 1 en la lista de álbumes más vendidos de EEUU y ha conseguido distribuir casi cuatro millones de copias gracias a éxitos pegadizos como "We are never ever getting back together".
Por detrás, con algo más de tres millones y medio de discos, se sitúa la banda adolescente One Direction con "Up all night", trabajo que se estrenó en el número 1 en su primera semana a la venta en EEUU, un registro histórico que ningún otro debutante británico había conseguido hasta entonces.
A ese éxito hay que sumar los casi tres millones de copias distribuidas de su segundo álbum, "Take me home". Los seis millones y medio de copias que suman juntos ambos álbumes auparían al quinteto al segundo lugar como artistas con más éxito en ventas y en el nuevo gran fenómeno mundial de la temporada.
La cuarta posición es para Lana del Rey, otra debutante que caldeó el ambiente en internet en los meses previos al lanzamiento de su disco, "Born to die", que acaba de ser reeditado y que ha vendido casi tres millones de copias.
Cabe destacar asimismo la buena acogida de "Babel", de la banda de folk-rock "indie" Mumford & Sons. Su segundo trabajo distribuyó 2,7 millones de copias.
"The truth about love" de Pink (casi 2,5 millones), "Believe" de Justin Bieber (2,3 millones), "Mylo Xyloto" de Coldplay (con 2,2 millones) y "Overexposed" de Maroon 5 (2 millones) cierran la lista de los diez álbumes más vendidos de 2012.
En el resto de la tabla, merece distinguirse a Michael Bublé, que consiguió el disco más vendido de las pasadas navidades con "Christmas" y que ha vuelto a convertirse en el más demandando en estas fechas festivas con otros dos millones de copias, lo que le deja en el puesto número 11.
Hasta el número 20, destacan otros dos debutantes. Primero, Emeli Sandé, que con "Our version of events" se coló en la ceremonia de clausura de los Juegos Olímpicos de Londres y en casi dos millones de hogares. Segundo, Ed Sheeran, que obtuvo con "Plus" el mayor número de nominaciones de los últimos premios Brit y 1,7 millones de copias.
Gotye (autor de la canción del año "Somebody that I used to know", incluida en "Making mirrors"), David Guetta ("Nothing but the beat"), Bruce Springsteen ("Wrecking ball"), Linkin Park (The living things"), Rod Steward ("Merry Christmas baby"), Black Keys ("El camino") y los neoyorquinos Fun. ("Some nights") completan la tabla de los veinte primeros.
Pese al arranque explosivo de "MDNA" de Madonna en su primera semana, el nuevo disco de la "ambición rubia" queda relegado a la posición vigésimo primera de la tabla con 1,6 millones de copias distribuidas.
EFE