El economista Luis Oliveros conversó en Noticias24 Radio, sobre el impacto que pudiera tener el incremento del precio de la gasolina, en las finanzas del país.
“En primer lugar, la gente pensaba que luego de la devaluación, vendría otra serie de medidas como impuestos más elevados, ajuste de la gasolina, pero no vino nada nuevo, dejaron esta decisión sola. Esto va a acarrear consecuencias en unos seis o siete meses, como por ejemplo otra devaluación, porque los problemas económicos van a persistir”, explicó.
A su juicio, con el nuevo escenario económico, la única opción que el Gobierno pudiera tomar es el incremento del salario mínimo, porque con la devaluación y la posibilidad de subir el precio de la gasolina “la gente necesita un dulcito (…) con ello lograrían mantener a la población tranquila y más contenta, pero sería un supuesto incremento porque en términos nominales es muy bueno, pero en la realidad es peor en comparación con el año pasado”.
En relación a la propuesta de subir el salario mínimo realizada por la bancada opositora, el economista indicó que hay que tomar en cuenta que “aunque haya habido un ajuste de la tasa cambiaria, la pérdida del poder adquisitivo fue de 33%. Entonces, si se lleva a cabo este proyecto, aunado a una LOT totalmente regresiva y la devaluación, implicaría el cierre de muchas empresas pequeñas y medianas y, por ende, más desempleo. El sueldo debe estar acorde a las capacidades productivas del trabajador”.Según Oliveros, “es necesario incrementar el valor de la gasolina, ya que el país pierde anualmente de 1700 millones de dólares, cuando comparamos en términos de costo, por regalárnosla y mantenerla como la más barata del mundo”.
Respecto a las importaciones en el país, Oliveros explicó que el “Estado venezolano ha sido el principal promotor, por un tema de manejo de la inflación, de restarle espacio a las empresas privadas. Ellos sin querer o queriendo han incidido fuertemente en esta materia y hay un conjunto de factores y de incentivos macabros, que revelan una sobre facturación proveniente del sector público (…) el ministro Giordani ha dado un mensaje que apunta a una disminución de las importaciones, sin embargo, no es la mejor manera”.
