El diputado Miguel Ángel Rodríguez, miembro del equipo nacional del voluntariado "Muévete" por la candidatura de Henrique Capriles, señala a los venezolanos que si tuviéramos una robusta capacidad de producir alimentos y otros bienes en Venezuela, tendríamos también base laboral estable, digna, y muchísimo menos espacio para que la delincuencia y fundamentalmente el narcotráfico busque candidatos para sus filas.
Lamenta que a las primeras de cambio, el corto camino hacia las elecciones de abril se convierta en un disparadero de insultos y de construcción de mitos religiosos que quisieran convencer a los ciudadanos que aquí se enfrentan fariseos y apóstoles, cuando en realidad se debe dirimir entre un escenario como el estructurado por más de 14 años l; y una propuesta en la que con respeto a las garantías de todos los venezolanos, se promueva el emprendimiento económico, la producción suficiente de bienes y servicios y la superación de las taras que impiden ganar la batalla a la delincuencia. "Esta última, es la solución-Capriles", dijo.
"Todos estamos obligados a aceptar que la paralización de la economía productiva por la falta de seguridad jurídica y el atropello a muchas empresas e industrias, desde hace tiempo nos alejaron de la independencia, por ejemplo de la seguridad agroalimentaria que demanda la Constitución, y más bien nos hacen dependientes de las importaciones, carísimas, , muchas veces insuficientes; y eso ha generado la tremenda escasez y el ya inaguantable aumento del costo de la vida que destruye la platica de la familia. Producir venezolano, con mano de obra venezolana, para la familia venezolana plantea Capriles y esto es urgente, tomando en cuenta el fortísimo golpe que nos ha dado la nueva devaluación de casi el cincuenta por ciento de nuestra moneda".
Rodríguez llama la atención sobre las propias sentencias que expresaba el fallecido Comandante Hugo Chávez a propósito del cómo por razones famélicas (necesidad-hambre), podrían llegarse a justificar acciones delictivas. A tenor de lo anterior dice que si lo que se emplea en favorecer a gobiernos amigos "más de 7.000 millones de dólares al año, lo enfocamos en impulsar proyectos privados y públicos de producción y fomento al desarrollo del empleo en Venezuela, del empleo real y constructivo; tendremos menos necesidad y hambre, menos justificación para delinquir". Al mismo tiempo, recordó, la "solución-Capriles" tiene disposiciones claras para el saneamiento del poder judicial, el rescate del sentido regenerativo de los centros penitenciarios y la profesionalización y superación socioeconómica de los cuerpos policiales.
El debate -dijo- se de o no se de entre Maduro y Capriles, estamos todos obligados a darlo en la calle, sin sectarismo y pensando en que debe ser para el bien de toda la población. "Como lo ha sostenido Capriles, cosas buenas se han de agradecer y además hay que garantizar su transparencia y continuidad. Pero lo malo, la criminalidad, la pérdida de los empleos productivos y los centros formales de trabajo, el ataque de la inflación al presupuesto familiar, la escasez; hay que enfrentarlo sin demora y lograrle solución".
Estima Miguel Ángel Rodríguez, que atravesando unos de los meses más violentos de los últimos años, la Ley Desarme, que desde hace varios meses está en manos de una comisión especial presidida por el Diputado Diosdado Cabello, y en la que habrían intervenido factores del oficialismo y de la unidad democrática, sea hoy una promesa de inminente cumplimiento. “Es un excelente comienzo para aislar el odio político y entre todos responder a la principal angustia de los venezolanos, sin distingo de preferencia política o cualquier otra condición”.
En todo caso, remarcó, que en la campaña haya entrado el tema de darle seguridad y paz a los venezolanos, obliga aún más a todos los electores a evaluar y a decidir. “insisto en que siempre se deberá luchar por las condiciones constitucionales para que las elecciones sean libres y justas. Siempre y hasta revertir los ventajismos, abusos y violaciones que todos conocemos y por los que hoy se están haciendo reclamos y al menos cinco grandes exigencias al poder electoral; pero nadie debe plantearse la idea de no votar este 14 de abril, sobre todo quienes clamamos por un cambio sustancial en el país y, como sabemos, tenemos aún la herramienta del sufragio en nuestras manos”.