Corea del Norte afirmó este martes que no abandonará su programa de armas atómicas mientras prosigan las "incesantes amenazas" de EEUU, pocos días después de que el régimen propusiera en China reiniciar el diálogo sobre su desnuclearización.
"Debido a las incesantes amenazas nucleares de Washington, Pyongyang no abandonará unilateralmente su poder de disuasión", comenta en un editorial el periódico Rodong Sinmun del Partido de los Trabajadores, brazo político del régimen de Kim Jong-un.
El periódico insta a EEUU a "retirar los equipos de guerra nuclear de Corea del Sur y sus alrededores, y abandonar la política hostil" hacia su país si realmente desea la paz en la península coreana.
Washington no mantiene actualmente armas nucleares en la península coreana (las retiró todas en 1991), pero en marzo y abril, en plena época de tensión con el Norte, trasladó a Corea del Sur aviones y submarinos con capacidad de realizar ataques atómicos durante las maniobras anuales Foal Eagle que realiza con Seúl.
Estas exigencias por parte norcoreana se producen días después de que el pasado fin de semana un enviado especial del régimen, el vicemariscal Choe Ryong-Hae, manifestara al presidente de China, Xi Jinping, que su país está dispuesto a retomar las conversaciones a seis bandas.
Este proceso paralizado desde 2009, que implica a las dos Coreas, EEUU, China, Japón y Rusia, busca la desnuclearización de Pyongyang a través de negociaciones entre las partes.
Por otra parte, un organismo del Norte invitó este martes, en un aparente gesto de distensión, a empresarios y autoridades surcoreanas a participar en un acto que el 15 de junio celebrará el país para conmemorar la mejora de lazos que ambos lados protagonizaron en el año 2000.
Un portavoz del Comité para la Reunificación Pacífica de la Patria norcoreano cursó esta invitación de modo informal a través de la agencia estatal KCNA, mediante un comunicado en el que, sin embargo, también criticó duramente al Gobierno del Sur, al que acusó de no tener una voluntad real de negociar.
Ante esto, fuentes de Seúl reafirmaron la postura expresada por el ejecutivo esta semana, cuando indicó que el único modo que contempla para resolver los problemas pendientes con Corea del Norte es el diálogo oficial entre autoridades de ambas partes.
Las relaciones entre Norte y Sur se encuentran hoy en uno de los peores momentos de la última década, y las líneas oficiales de comunicación entre ambos países se hallan cortadas.
EFE
"Debido a las incesantes amenazas nucleares de Washington, Pyongyang no abandonará unilateralmente su poder de disuasión", comenta en un editorial el periódico Rodong Sinmun del Partido de los Trabajadores, brazo político del régimen de Kim Jong-un.
El periódico insta a EEUU a "retirar los equipos de guerra nuclear de Corea del Sur y sus alrededores, y abandonar la política hostil" hacia su país si realmente desea la paz en la península coreana.
Washington no mantiene actualmente armas nucleares en la península coreana (las retiró todas en 1991), pero en marzo y abril, en plena época de tensión con el Norte, trasladó a Corea del Sur aviones y submarinos con capacidad de realizar ataques atómicos durante las maniobras anuales Foal Eagle que realiza con Seúl.
Estas exigencias por parte norcoreana se producen días después de que el pasado fin de semana un enviado especial del régimen, el vicemariscal Choe Ryong-Hae, manifestara al presidente de China, Xi Jinping, que su país está dispuesto a retomar las conversaciones a seis bandas.
Este proceso paralizado desde 2009, que implica a las dos Coreas, EEUU, China, Japón y Rusia, busca la desnuclearización de Pyongyang a través de negociaciones entre las partes.
Por otra parte, un organismo del Norte invitó este martes, en un aparente gesto de distensión, a empresarios y autoridades surcoreanas a participar en un acto que el 15 de junio celebrará el país para conmemorar la mejora de lazos que ambos lados protagonizaron en el año 2000.
Un portavoz del Comité para la Reunificación Pacífica de la Patria norcoreano cursó esta invitación de modo informal a través de la agencia estatal KCNA, mediante un comunicado en el que, sin embargo, también criticó duramente al Gobierno del Sur, al que acusó de no tener una voluntad real de negociar.
Ante esto, fuentes de Seúl reafirmaron la postura expresada por el ejecutivo esta semana, cuando indicó que el único modo que contempla para resolver los problemas pendientes con Corea del Norte es el diálogo oficial entre autoridades de ambas partes.
Las relaciones entre Norte y Sur se encuentran hoy en uno de los peores momentos de la última década, y las líneas oficiales de comunicación entre ambos países se hallan cortadas.
EFE