Al menos diez iraquíes, en su mayoría turcomanos, han muerto en las últimas horas y otros 31 han resultado heridos en distintos ataques en el país, informaron hoy fuentes policiales.
Un coche bomba estalló en la localidad de Tuz Jormato, 200 kilómetros al norte de Bagdad, lo que causó la muerte de seis turcomanos y heridas a otros 29, así como daños en una decena de casas y varios coches situados cerca del lugar.
Los cuerpos de seguridad desactivaron otro coche bomba que estaba aparcado cerca de un mercado en esa misma localidad, en la que conviven árabes, kurdos y turcomanos y que es disputada entre el Gobierno de Bagdad y el del Kurdistán iraquí.
Además, un supuesto suicida que conducía un coche bomba lo detonó anoche al paso de una patrulla de la policía en una carretera en el pueblo de Al Retba, en el oeste de Irak.
Un oficial de la policía murió en ese atentado y otros dos efectivos de seguridad que viajaban en el convoy resultaron heridos graves, añadieron las fuentes.
En la zona de Zizena, en el este de Bagdad, varios hombres armados irrumpieron en una casa, mataron a tres mujeres con pistolas con silenciadores y se dieron a la fuga.
EFE