Reuters) .- El petróleo subía el jueves, aunque el avance era limitado por preocupaciones de que sólidos datos económicos en Estados Unidos puedan acercar a la Reserva Federal a reducir su masivo programa de estímulo monetario que ha apuntalado los precios de las materias primas.
El crudo Brent sumaba 34 centavos, a 115,25 dólares por barril a las 1523 GMT, tras cotizar más temprano en 115,55 dólares.
El crudo en Estados Unidos ganaba 1,16 dólares, a 108,39 dólares por barril.
El Brent subió más temprano debido a que inversores temieron que las interrupciones en la oferta puedan persistir en Oriente Medio, luego de que autoridades en Estados Unidos respaldaron un ataque militar estadounidense contra Siria.
El crudo Brent y el contrato en Estados Unidos cedieron algunas de sus ganancias luego de que sólidos datos de empleo y servicios en ese país sugirieron que la mayor economía del mundo podría ser lo suficiente fuerte como para resistir una reducción de las medidas de estímulo de la Reserva Federal.
El Instituto de Gerencia y Abastecimiento (ISM, por sus siglas en inglés) reportó que el ritmo de crecimiento del sector de servicios estadounidense se aceleró en agosto a la tasa más veloz en casi ocho años. ID:nL2N0H1121
En tanto, el Departamento de Trabajo dijo que los empleadores privados sumaron 176.000 puestos en agosto, mientras que las nuevas solicitudes de beneficios por desempleo cayeron la semana pasada a casi el mínimo nivel en cinco años.
El petróleo en Estados Unidos recibió apoyo de datos que mostraron que las existencias de crudo en ese país cayeron en 1,84 millones de barriles, incluyendo un descenso de 1,83 millones en el centro de distribución Cushing.
El Comité de Relaciones Exteriores del Senado estadounidense votó a favor de una resolución que da un límite de 60 días a las acciones militares en Siria, con una extensión posible de 30 días, y prohíbe el uso de tropas estadounidenses para el combate terrestre.
Si bien Siria no es un productor de petróleo importante, los mercados ya están luchando para lidiar con pérdidas de suministros de una región que bombea un tercio del crudo del mundo. Las interrupciones en Oriente Medio y África han superado los 3 millones de barriles por día, o alrededor de 3,5 por ciento de la demanda global.